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Científicos logran entrar a los sueños lúcidos e interactuar con las personas dormidas por primera vez

Los sueños lúcidos han sido descritos desde diversas tradiciones religiosas, pero por primera vez son analizados con evidencia empírica.

Quizá el primer pensador que se ocupó en darle un lugar a sueños fue Sigmund Freud. En su tiempo, este campo de estudio no fue bienvenido por otros científicos “duros”, enfocados siempre en el aspecto material del conocimiento. A 121 años de la publicación de La interpretación de los sueños (1900), un equipo de neurocientíficos logró comunicarse con personas mientras tenían sueños lúcidos.

Sueños interactivos

El equipo de científicos encargados del estudio llamaron a este fenómeno como “sueños interactivos”. En ellos, las personas están en un estado de sueño profundo en el que es difícil distinguir entre la realidad y el plano onírico. Lo verdaderamente sorprendente es que logran seguir instrucciones, contestar preguntas y acertar en problemas matemáticos elementales.

Las preguntas en torno a los sueños no son nuevas. Sin embargo, los resultados de esta investigación aportan nuevas preguntas a lo que sucede físicamente en el cerebro cuando estamos dormidos. Según los investigadores, podría ser el umbral para empezar a entrenar nuestros sueños.

¿Qué podría lograrse en este terreno?

Incluso en el campo de estudio de la Psicología, los sueños siguen siendo una interrogante significativa. Si se incursiona bajo condiciones medibles en este campo, de entrada, podríamos lograr objetivos específicos al dormir. En un extremo más lejano, tratar problemas de salud, apoyar los procesos psicológicos terapéuticos o atacar enfermedades mentales de raíz.

Según el psicólogo Ken Paller, de la Universidad Northwestern, ya es posible establecer comunicación en tiempo real:

“Descubrimos que las personas en el sueño REM pueden interactuar con un experimentador y entablar una comunicación en tiempo real. También hemos demostrado que los soñadores son capaces de comprender preguntas, participar en operaciones de la memoria de trabajo y producir respuestas”.

Para la investigación, se trabajó con una muestra de 36 personas en cuatro laboratorios distintos. Uno de los voluntarios padecía de narcolepsia, y reportó tener sueños lúcidos frecuentemente. Las etapas más profundas fuera de la vigila se monitorearon con electroencefalograma (EEG), a través de los cuales, se logró interactuar con los individuos estudiados.

Una respuesta desde otro plano de consciencia

Fueron capaces de responder preguntas básicas, como si hablaban inglés o sumas básicas. Las respuestas se dieron a través de movimientos oculares o movimientos de los músculos faciales acordados de antemano. A lo largo de 57 sesiones de sueño, se observó al menos una respuesta correcta a una pregunta en el 47% de las sesiones en las que el participante confirmó haber tenido esa experiencia.

Karen Konkoly, neurocientífica de la misma institución, destacó que lograron encontrar formas diferentes para comunicarse con los dormidos, aún en ese plano de consciencia diferente:

“Reunimos los resultados porque sentimos que la combinación de los resultados de cuatro laboratorios diferentes que utilizan diferentes enfoques da fe de manera más convincente a la realidad de este fenómeno de comunicación bidireccional”.

Según los resultados del estudio, los investigadores comparan tratar de interactuar con personas en sueños lúcidos con tratar de comunicarse con un astronauta en el espacio. Este esfuerzo puede tener repercusiones en el análisis de los sueños, la memoria y la terapia psicológica o psiquiátrica a través de la evidencia empírica.

MUY INTERESANTE.

 

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