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¿Cómo reducir el uso de plástico en el día a día?

El plástico se encuentra presente como componente en los productos más insospechados. Por eso, se están convirtiendo en un serio problema para el planeta. Sin embargo, podemos reducir su uso.

El plástico es un material que está en todas partes y que utilizamos casi a cada instante. Se encuentra en todo tipo de objetos, sobre todo envases, materiales de construcción, accesorios e incluso en el textil de la ropa y en algunos ingredientes de cosméticos. Sin embargo, es posible reducir el uso de plástico.

Ahora, ¿por qué es necesario reducirlo? pues bien, a continuación profundizaremos en ello y también, te propondremos algunas medidas muy prácticas para que puedas comenzar a hacerlo, día a día.

El plástico y la contaminación

Según la conocida organización ecologista Greenpeace, cada año llegan a mares y océanos una cantidad de plástico que equivale a 1200 veces el peso de la Torre Eiffel. Dicha cantidad no es el único problema, es tan solo parte de él.

De hecho, el aspecto más preocupante sobre el plástico es que, una vez se ha terminado de utilizar, tarda mucho en descomponerse. Por ejemplo, una botella de plástico puede tardar incluso hasta 500 años en biodegradarse.

En vista de que la producción mundial de plástico asciende a millones de toneladas al año y que continuamos adquiriendo productos de todo tipo y tirándolos en cualquier parte, la cifra de desechos no deja de aumentar.

La gran mayoría del plástico acaba vertido en mares y océanos de todo el mundo, perjudicando gravemente los ecosistemas. El impacto es dramático. Y aunque reciclar los envases es una buena acción para reducirlo, en realidad, lo ideal sería reducir su consumo a diario.

¿Cómo reducir el uso de plástico?

Las siguientes medidas que vamos a comentarte son prácticas muy sencillas que te permitirán reducir tu consumo de productos elaborados con plástico (envases, utensilios, bolsas, etcétera), sin realizar apenas esfuerzo y sin sentir que algo te está faltando.

Prefiere bolsas de tela a bolsas de plástico en el supermercado

Desde el 1 de julio de 2018 en España pasó a tener vigencia una medida muy importante: se prohíbe dar bolsas de plástico gratis a los clientes en los diversos establecimientos. Y si alguien solicita una, debe pagar cierta cantidad por ella.

El objetivo de esto es crear conciencia y ayudar a reducir el consumo de plástico. Del mismo modo, esta medida ayuda a que las personas se acostumbren a llevar sus propias bolsas (de tela u otros materiales) y a darles un mejor uso. No usar y tirar, como se acostumbraba.

El plástico no es la mejor opción. Hay muchas formas de evitar su consumo. Una de ellas consiste en llevar nuestra propia bolsa de tela al momento de hacer la compra.

Los tote bags han ganado gran popularidad y, gracias a ello, hoy en día se pueden encontrar modelos con diversos tipos de diseño. Monocolor, estampados, lisos, etcétera. ¡Hay para todos los gustos!

Sin embargo, aún hay más. Para el año 2021, las bolsas de plástico ligeras y muy ligeras no biodegradables se prohibirán totalmente. En especial, las fragmentables, las más tóxicas. Esta medida no será adoptada solo en España, sino países como Italia y Francia. El objetivo final es lograr implementarla en toda la Unión Europea.

Por tu parte, ya sea desde el punto de vista del ahorro al no tener que pagar bolsas o por conciencia ecológica, lo mejor es optar por bolsas de tela cada vez que vayamos al supermercado. De este modo, estaremos reduciendo el impacto medioambiental.

Compra a granel y evita el sobreenvase

Si lo piensas bien, es incluso más económico comprar a granel: adquieres solo lo que necesitas y puedes elegir. Por el contrario, los productos envasados contienen mucho plástico (bandejas, envoltorios, etcétera) que acabarán en vertederos y en mares y océanos.

Al pesar tu fruta, evita envolverla en una bolsa de plástico. En lugar de ello, coloca la etiqueta que marca el peso y el precio directamente en la piel o cáscara. Luego, para llevarla a casa, podrás introducirla en tu tote bag. 

Evita los productos de limpieza en envases de plástico

Para evitar utilizar productos de limpieza y, una vez terminados, tirar sus envases de plástico, lo mejor es optar por otro tipo de productos caseros y naturales.

Por ejemplo, desde siempre se han utilizado determinados ingredientes como el jabón, el vinagre, el bicarbonato, para lavar y limpiar. De este modo, estarás utilizando productos ecológicos, evitando usar plástico de más y, finalmente, obteniendo resultados de limpieza igualmente impecables.

Revisa la composición de tus cosméticos

Si no lo sabías, muchas cremas y otros productos de belleza contienen microesferas de plástico. Además, estas son las más peligrosas para el medio ambiente, puesto que pueden fácilmente ser ingeridas por los animales y acabar envenenándolos.

Se trata de microesferas de nailon, polietileno y polipropileno que, normalmente, están presentes en cremas y productos exfoliantes.

Por esa razón, es mejor que optes por productos cosméticos naturales que no incluyan plástico entre sus componentes. Asimismo, otra buena idea es preparar tus propias cremas caseras.

Reciclar para reducir el uso de plástico

Separar los desechos es muy fácil. En un bote colocamos todo lo que esté hecho de papel y cartón, en otro el plástico y el aluminio y en otro el vidrio. Hay países (como Suiza) en donde son un poco más específicos y separan el plástico en: envases PET, aluminio, y otros tipos de plástico.

Sin embargo, en España, todo lo que sea de plástico debe llevarse al contenedor amarillo para que sea reciclado. Según los datos de Eurostat, en el país apenas se recicla el 29,7% del total de residuos. Esto significa que nos encontramos muy lejos de una concienciación profunda sobre los beneficios del reciclaje.

Conclusión

Al reducir el uso de plástico, estaremos minimizando el impacto ambiental en gran medida. Aunque no lo veamos de forma contundente, nuestra acción vale mucho y debe mantenerse en el tiempo. De esta manera, los mares y océanos, estarán más limpios en el futuro. Por otra parte, evitamos que la producción de plástico aumente y las respectivas emisiones de CO2.

Basta con cambiar algunos hábitos de vida para reducir el uso de plástico en nuestras vidas de forma eficaz. Sencillamente hay que procurar la forma más inteligente de darle varios usos a los objetos que ya tenemos.

(Con información de Mejor con Salud)

 

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