Una bomba nuclear no sólo genera radiación en forma de luz brillante y cegadora, sino también un calor abrasador y potentes ondas de choque.
Imagina tan solo por un momento que una bomba nuclear cae en tu lugar de residencia. Sin duda, se trata de una imagen aterradora, el apocalipsis absoluto. Las posibilidades de salir vivo quizás pienses que son escasas. Sin embargo, puede que no sea así de manera absoluta. Según un nuevo estudio, existe un lugar en el que un ser humano puede sobrevivir a una bomba nuclear. ¿Pero cuál es este sitio? ¿Cómo sobrevivir a una bomba nuclear?
Los espacios cerrados como alternativa a la detonación de una bomba nuclear
En efecto, ciertos tipos de espacios cubiertos pueden ser una buena alternativa para salir vivo de una detonación nuclear, siempre y cuando se cumplan ciertas condiciones.
Una bomba nuclear no sólo genera radiación en forma de una luz brillante y cegadora, además de un calor abrasador. También genera potentes ondas de choque que pueden desplazarse decenas de kilómetros. Por ello hay que evitar pasillos y puertas, y buscar los rincones de las habitaciones sin ventanas, ya que de esa manera nos aseguramos de estar lejos de objetos que nos puedan golpear.
El equipo detrás de esta investigación simuló una explosión nuclear de una bomba atómica de 750 kilotones. Para que te des una idea de ello, la bomba que Estados Unidos lanzó en Hiroshima fue de 15 kilotones y la de Nagasaki, de 25.
Una explosión de esta magnitud probablemente arrasaría todo lo que se encontrara en un radio de 4 kilómetros. Sin embargo, las personas que se encontraran más allá de ese radio podrían tener alguna posibilidad, en caso de encontrar un lugar adecuado con una estructura resistente.
La razón por la que eligieron los 750 kilotones es porque es la misma medida que caracteriza al Sarmat ruso, un misil balístico intercontinental que el Kremlin probó el pasado mes de abril. La invasión rusa de Ucrania ha suscitado la preocupación de que nos estemos acercando a una guerra nuclear.
Así sería la onda expansiva con una bomba de estas características
Utilizando estos modelos, los científicos calcularon cómo se movería la onda expansiva a través de los edificios (tomando en cuenta las habitaciones, paredes, esquinas, puertas, pasillos, ventanas y portales) a distancias de entre 2,5 y 30 millas del lugar de la detonación.
Según los hallazgos, las zonas estrechas del interior de los edificios, como portales y pasillos, actúan como un túnel de viento, lo cual acelera la onda expansiva hasta presiones realmente peligrosas. A veces pueden llegar a ser tan fuertes como para aplastar los huesos de un ser humano.
Sabiendo lo anterior, ¿entonces cuál es la zona más segura de estos espacios cerrados?
La mejor ubicación es en la mitad del edificio más alejada de la explosión, en una habitación que no tenga ventanas. Incluso en la habitación frontal que da a la explosión, uno puede estar a salvo de las altas velocidades del aire si se coloca en las esquinas de la pared que da a la explosión, dijo Ioannis William Kokkinakis, co-autor del estudio, en una entrevista a Insider.
Los autores creen que conocer este tipo de información ayudaría a los expertos en seguridad nuclear a diseñar mejores estrategias para mitigar los daños de las explosiones atómicas. Asimismo es una información valiosa para los civiles ante un hipotético evento de esta magnitud.
MUY INTERESANTE.