La firma inglesa Christie’s generó controversia al abrir una subasta de piezas arqueológicas saqueadas de territorio mexicano. La Fiscalía General de la República (FGR) en México impuso una denuncia de talla internacional por la próxima subasta de piezas arqueológicas por parte de Christie’s. El evento, que ha de celebrarse en París el próximo 9 de febrero, tendrá como protagonistas 33 artículos que serán comercializados de manera ilegal.
El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) denunció ante la fiscalía emprender acciones legales contra la comercialización de las piezas. De la misma manera, se solicitó a la Secretaría de Relaciones Exteriores apoyo para recuperar las obras, que son parte del patrimonio cultural nacional.
Una subasta de carácter imperialista
El saqueo ilícito de piezas producidas en la época precolombina no es una práctica nueva para las potencias europeas. A pesar de los siglos que nos separan del proceso colonizador al que se sometió a América, pareciera que algunas de las viejas costumbres imperialistas persisten en el tiempo.
Con respecto a las acciones reprobables de la firma inglesa, Diego Prieto Hernández, director general del INAH, manifestó lo siguiente en una conferencia de prensa virtual: “El Gobierno de México no está ni estará nunca de acuerdo con el saqueo y el comercio ilegal del patrimonio de las naciones”
La denuncia fue interpuesta con el objetivo de evitar que la subasta se lleve a cabo, ya que los bienes son propiedad de México, como parte del legado de las culturas prehispánicas a la Historia nacional. A los ojos de la institución, esta subasta tiene un carácter imperialista que no sólo peca de anacrónico, sino que atenta contra el acervo cultural del país.
Protesta, denuncia y recuperación
De acuerdo con un comunicado del Gobierno de México, desde 1972 la Ley Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicos, Artísticos e Históricos establece que “los bienes arqueológicos mexicanos son inalienables, imprescriptibles e inembargables”. Por esta razón, quedan fuera de cualquier compraventa privada, transacción o acto de comercio.
Sin embargo, Prieto Hernández subrayó que el problema “no es con Francia ni con el Estado francés, sino con un acto de comercio que no debe ocurrir”. Con esto, el Estado Mexicano reiteró su intención de evitar el saqueo y comercio ilícito de piezas prehispánicas y bienes arqueológicos, que si bien son patrimonio de la humanidad, no deberían de pertenecer a ninguna colección particular.
MUY INTERESANTE.