La asertividad es una de las herramientas más útiles que puedes adquirir para tener éxito personal y profesionalmente. Seguro has escuchado siempre que todos hablan de la importancia de decir lo que piensas y ponerte de pie en defensa de tu posición, aunque tu ejército sea de una persona… Pero ¿cómo hacerlo sin herir los sentimientos de los demás, sin ser agresivo y sin dar pie al criticismo excesivo?
No basta con decir lo que piensas, también importa cuándo y cómo lo haces
Primero, hay que arrojar luz sobre lo que significa ser asertivo. La Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos (NIH) define la asertividad como “defender las libertades interpersonales e involucrar a otros en la búsqueda de soluciones viables y estables”. Además, ser asertivo es una cualidad que se aprende más que un talento innato y empieza por la auto observación, que nos ayuda a hacer a un lado el criticismo excesivo (uno de los principales obstáculos para una comunicación asertiva) y la necesidad de imponer nuestra opinión a los demás.
Fundamentalmente, sabemos que alguien está siendo asertivo cuando sugiere soluciones eficientes a un altercado o comunica lo que siente sin ofender a otros, pero también hace parte de la asertividad la lectura de las circunstancias, de ese modo desciframos cuándo es el mejor momento y lugar para hablar o cuándo conviene guardar silencio. Elegir bien cuándo y cómo pronunciarnos es tan importante que, cuando no se desarrolla bien esta habilidad, puede ser muy fácil lastimar o humillar profundamente a los demás en el intento de hacer valer nuestro punto de vista.
Beneficios de ser asertivo
Las ventajas de ser un comunicador asertivo se extienden al ámbito laboral, académico, familiar y todos los escenarios que comprenden nuestra vida social. Entre los beneficios tenemos:
- Disminuye la ansiedad y el riesgo de padecer depresión
- Mejora la calidad de nuestras relaciones
- Se ve fortalecida nuestra confianza y autoestima
- Evitamos caer en las redes del criticismo malsano y la agresividad
- Nos empoderamos, tomando las riendas de lo que necesitamos y queremos lograr en la vida
¿Cómo ser más asertivo?
Psychology Today destaca las características de las personas que han trabajado su asertividad y comparte algunas técnicas para mejorar nuestras habilidades comunicativas.
Características de las personas que saben decir lo que piensan
- Mantienen contacto visual cuando hablan
- Manejan una buena postura
- Usan su lenguaje corporal efectivamente
Consejos para mejorar nuestra asertividad
- Cuando quieras comunicar algo, expresa concisa y directamente lo que sientes o necesitas del otro.
- Escucha atentamente su respuesta, respeta sus pensamientos y emociones en lugar de contraatacar u oponer resistencia.
- Ofrece soluciones alternativas al conflicto cuando la primera opción no sea viable, o cuando el otro no esté de acuerdo con la propuesta inicial.
- Si resulta demasiado difícil llegar a un consenso o el otro se niega a escucharte, no insistas.
- La dignidad también se trata de saber cuándo dar media vuelta e irse; así evitarás que el ambiente se ponga hostil o dar lugar a posibles brotes de agresividad.
- Hay una clara diferencia entre ser asertivo y ser pasivo; es bueno esperar el momento oportuno para comunicar lo que sientes, pero si lo postergas estarás acomodándote tácitamente a una situación que te hiere o incomoda.
- Cuidado con el conformismo.
El arte de saber vivir.