Luego de lo vivido en España en un partido entre el Real Madrid y el Valencia, donde un grupo de aficionados hizo ofensas racistas en contra del brasileño Vinicius, ahora este tipo de discriminación se trasladó a Sudamérica y en específico en Argentina, en donde aficionados de Gimnasia y Esgrima de La Plata ofendieron a jugadores de Independiente de Santa Fe de Colombia.
Fue el propio delantero colombiano Hugo Rodallega, con paso en el fútbol mexicano hace algunos años, quien reveló que durante el encuentro de este martes correspondiente a la Copa Sudamericana, un puñado de seguidores argentinos hicieron gestos ofensivos en contra de los jugadores de raza negra.
LAMENTABLE: OTRO EPISODIO DE RACISMO EN EL FÚTBOL PROFESIONAL. Tras el partido de CONMEBOL #Sudamericana en Argentina, Hugo Rodallega denunció actos racistas en el Bosque de Gimnasia.
— SportsCenter (@SC_ESPN) May 24, 2023
?️ "QUE TE LLAMEN MONO, NEGRO... ES UNA FALTA DE RESPETO"
?️ "EN BOGOTÁ LOS TRATAMOS BIEN" pic.twitter.com/rZ7eFIlOnb
"No mejoramos como humanidad. Un desastre en el mundo entero. El tema del racismo ya cansa", fueron las declaraciones del veterano delantero demostrando su hartazgo de este tipo de gestos que se generaron luego de una pelea entre jugadores dentro de la cancha, la cual no pasó a mayores, pero que enardeció a la grada y respondió con los insultos.
Sin embargo, esta no es la primera vez que sucede en Argentina, ya que este mismo semestre, un grupo de hinchas de Racing de Avellaneda fueron señalados por hacer gestos de mono en contra de aficionados del Flamengo de Brasil en un partido correspondiente a la Copa Libertadores, por lo que la Conmebol aplicó una sanción al conjunto de Buenos Aires de 100 mil dólares.
Mientras que la Conmebol sanciona económicamente al club argentino, en España sigue la polémica de qué sucederá cuando se vuelva a presentar un acto racista en contra de algún futbolista, recordando que la FIFA fue sumamente dura en contra de otro tipo de discriminación que le achacó a la Federación Mexicana de Futbol para abolir el grito homofóbico que se generaba en cada despeje de portería y que incluso provocó diferentes sanciones.