La tensa situación que se vive en Medio Oriente por el conflicto entre Estados Unidos en Irán, podría tener consecuencias en el ámbito deportivo, y en específico en el futbol ya que el Mundial que tendrá lugar en Catar en 2022 podría correr peligro.
En los últimos días ocurrieron una serie de ataques que han vuelto esta zona del mundo la más peligrosa, empezando por el asesinato del general iraní Qasem Soleimani, el cual se adjudicó la milicia estadounidense, acatando una orden del presidente Donald Trump.
A esto, Irán contesto con un ataque a dos bases militares de Estados Unidos ubicadas en Irak. Asimismo, han habido otras respuestas en Bagdad, capital iraquí, y en Teherán, la ciudad iraní.
Por si esto fuera poco, la cercanía política que tiene Catar con Irán, y el bloqueo de la mayoría de los países del Medio Oriente con el emirato, ponen el Mundial catarí en duda, por lo que se ha comenzado a especular con el posible cambio de sede para este evento, considerado el segundo más importante del planeta por detrás de los Juegos Olímpicos.
Y estás versiones también señalan que en dado caso que la FIFA decida quitarle la sede a Catar, adelantaría a los anfitriones que habrá en 2026, que son México, Estados Unidos y Canadá, países que prácticamente estarían con la infraestructura suficiente para recibir la justa mundialista.
Hasta el momento, ni la FIFA ni los organizadores del Mundial en Catar han fijado postura aunque por ahora sería prematuro dar por hecho que habrá un cambio de sede, pero la posibilidad existe.