Por: Cortesía

Espectáculos

Adele pide a sus fans que no arrojen peluches del Dr. Simi por una razón de seguridad

Adele, reconocida cantante de música pop en inglés, es una artista sumamente querida por el público mexicano debido al amor que ha demostrado en diversas ocasiones hacia nuestro país, especialmente con los muñecos del Dr. Simi; aunque ahora pidió ya no lanzarle éstas piezas hechas a manos.

¿Qué pasó? A pesar de que la intérprete de 'Rolling in the deep' se dijo fan de dichos muñecos, lo cierto es que ahora se dirigió al público para pedirles encarecidamente que detuviera la costumbre de aventarle tales regalos.

Y es que todo fue acompañado de un importante discurso donde explicaba la razón por la cual pedía a sus seguidores que ya no lanzaran peluches al escenario. La realidad de dicha solicitud estaba ligada a un tema de seguridad.

De acuerdo con la famosa hubo un incidente durante una de sus presentaciones, donde los hechos no pasaron a mayores pero enfatizó que pudo haber pasado algo peor y era necesario dejar de enviar los muñecos en esa forma.

"Dije hace unos meses que si tienen un Simi para mí me lo tiren, eso dije... pero ya no podemos hacer eso porque ayer un idi*ta me lanzó un gran cristal, aprecio los cristales, los amo, pero no sé qué pensaba esa persona y le cayó a alguien".
Por dicha razón hizo un llamado para que la audiencia ya no aventara regalos al escenario pues el momento podría terminar en una tragedia que arruinara la noche y pusiera en peligro la integridad de los demás asistentes.

"Por favor no metan a los muñecos Simi, sólo déjenlo con uno de los asistentes. Todos saben lo obsesionada que estoy con ellos, así que van a llegar a mi camerino, se los prometo; pero por favor no metan nada más abajo porque alguien podría salir herido y si la metieran en mi cabeza obviamente me mataría".
Al fondo se escucha que las personas están realmente consternadas con las declaraciones de la cantante; lo que comentó era realmente preocupante al saber que alguien puso materiales delicados en un muñeco, ya que ello era un factor de peligro para Adele y los asistentes.