En pleno concierto del Radical Optimism Tour, Dua Lipa se aventó una de esas jugadas que enloquecen a un recinto entero: invitó a Fher Olvera, vocalista de Maná, para cantar juntos el clásico “Oye mi amor”.
El Estadio GNP Seguros estaba a reventar el 2 de diciembre y la gente explotó cuando escuchó los primeros acordes del tema. La mezcla entre la vibra británica de Dua Lipa y el sello inconfundible de Fher creó un momento totalmente único, casi irreal para quienes estaban ahí.
Esta colaboración marcó el segundo show de la artista en Ciudad de México, donde ya había mostrado amor por la música latina, pero esta vez se superó.
Dua Lipa y su ruta latina llena de guiños locales
Durante esta gira por América Latina, Dua no solo trae producción de alto nivel, visuales majestuosos y coreografías milimétricas: también está haciendo homenajes musicales dedicados a cada país.
En México ya había sorprendido interpretando “Bésame Mucho”, pero esta vez dio un paso más grande al lanzarse con uno de los himnos máximos del rock en español. En Argentina cantó “Música Ligera”, en Perú “Cariñito”, en Chile “El Duelo”, y en Brasil se dejó llevar por “Más que nada” y “Magalenha”.
Su tercera y última fecha en CDMX será el 5 de diciembre de 2025, donde cerrará su recorrido en México con una producción que la prensa ya describe como una de las más completas del año.
@valecitajasso @Dua Lipa canta Oye Mi Amor junto a Fher de Maná #fyp #dualipa #viral #mexico?? #radicaloptimismtour ♬ sonido original - Valeria Hasso
Una canción que sigue marcando generaciones
El clásico “Oye mi amor”, lanzado en 1992 dentro del álbum “¿Dónde jugarán los niños?”, es de esas canciones que nunca pasan de moda. Su fusión de rock con ritmos latinos y su letra directa la convirtieron en un himno que cruzó fronteras y sigue sonando en cada fiesta, concierto y playlist nostálgica.
No por nada las redes sociales se inundaron con comentarios como “Icónica”, “Qué increíble”, “México es más rápido que la IA” o hasta el inevitable “Hubiera sido Caifanes”.
El dueto entre Dua Lipa y Fher terminó siendo de esos momentos que quedan guardados en la memoria colectiva: inesperado, explosivo y con esa energía que solo los conciertos en CDMX saben crear.











