Música de banda, alcohol, comida y regalos que pueden ir desde juguetes hasta autos de modelo reciente. Así son los posadas de Iván Archivaldo Guzmán Salazar, Jesús Alfredo Guzmán Salazar, Ovidio Guzmán López y Joaquín Guzmán López, mejor conocidos como “Los Chapitos”.
Falta menos de una semana para que los mexicanos comiencen a celebrar las posadas navideñas, cuyo origen se remonta a la colonia española, concretamente enre los años 1521 y 1580. Algunas de esas fiestas tradicionales, donde no pueden faltar el ponche, los dulces y las piñatas, desde hace algunos años tienen un toque particular en las cercanías del Triángulo Dorado, donde confluyen los estados de Chihuahua, Durango y Sinaloa.
Si algo ha caraceterizado a dicha región es la presencia cada vez más fuerte de la narcocultura en buena parte de sus costumbres, incluidas las tradiciones más arraigadas. La última expresión de este tipo de narcoeventos se registró hace exactamente un año, en diciembre de 2021.
Como cada año, en las redes sociales comenzaron a circular videos e imágenes de una supuesta posada organizada por los hijos de Guzmán Loera, quienes actualmente ostentan el control total de la droga que se mueve en la capital Sinaloense.
Las imágenes mostraron un evento multitudinario en el que se observaban cajas de regalos con juguetes Fisher-Price, cuadros de fomi para bebés, muñecas Little Mommy, triciclos, bocinas, patines, bicicletas, pelotas de plástico y electrodomésticos como estufas y refrigeradores. Todos los artículos tenían un sello distintivo para indicar de dónde venía tanta “genrosidad” hacia la clase más popular de Sinaloa: las iniciales JGL en mayúscula con tonos dorados y sobre un fondo negro.
La imágenes también dieron cuenta de los ocho vehículos del año tipo sedán que supuestamente se rifaron entre los asistentes, de los variados grupos de música de banda que “amenizaron” la narcoposada, de las piñatas de todos los colores y de las decenas de gorras negras con las mismas siglas impresas y la leyenda “chapiza” bordada en uno de los costados
Gobierno de Sinaloa desmintió posadaSIn embargo, apenas se empezó a esparcir el rumor el secretario de Seguridad Pública de Sinaloa, Cristóbal Castañeda Camarillo, salió a desmentir la versión de la posada y confirmó que las imágenes no correspondían a ese año.
El secretario aclaró que el material audiovisual correspondía a un evento que sí había sido organizado por los hijos del Chapo pero el año anterior. Aquella vez la fiesta se organizó en las canchas deportivas de San Diego, una localidad perteneciente a la Sindicaura de El Dorado. No obstante, efectivos del ejército irrumpieron a mitad del baile y el júbilo para disolver la celebración.
“Circula una información que señala un evento reciente en Sinaloa, lo cual es falso; las imágenes que se difunden corresponden al 17 de diciembre del 2020, fecha en la que se realizó un operativo por parte de los tres órdenes de gobierno”, escribió Castañeda Camarillo en su cuenta de Twitter.
El secretario también aclaró que los siete vehículos tipo sedán que aparecían en las imágenes difundidas hace un par de días, y que los narcos sinaloenses planeaban rifar entre los asistentes, corresponden a los autos que fueron asegurados por las autoridades en 2020.
Los cuatro hijos de Joaquín Guzmán, conocidos como “Los Chapitos”, se han convertido en objetivos prioritarios de las autoridades de Estados Unidos al ofrecer 20 millones de dólares por información que permita su captura.
La organización de los cuatro “Chapitos” cuenta con al menos 5 mil hombres armados y controla el trasiego de drogas en la zona norte de Sinaloa, el poniente de Sonora y la totalidad de los estados de Nayarit, Chihuahua y Baja California Sur, según la Fiscalía General de la República (FGR).
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