Jalisco.- El cónsul honorario de Perú en Jalisco, Alejandro Malacara Ortiz de Montellano, confirmó que tres ciudadanos de origen peruano y un mexicano desaparecieron en el municipio de Atotonilco El Alto. Las víctimas son los peruanos Wilmert Percy García Guzmán, de 47 años de edad; Juan Carlos Tecsi Huaman, de 35, así como Mary Lucero Mescco Molina, quien tiene 25 años, y el mexicano Carlos Alberto Castellanos García.
Ahora que se desconoce su paradero, se descubrió que los dos hombres extranjeros se cambiaron de nombre durante su estancia en México. Por su parte, la Fiscalía del Estado de Jalisco informó que trabaja en la localización de tres personas de origen peruano y un mexicano, quienes se encuentran desaparecidos desde el pasado mes de agosto del año en curso.
El diplomático colabora en las indagatorias, y explicó que los dos hombres extranjeros se cambiaron de nombre durante su estancia en México, y se casaron con dos mujeres quienes reportaron su ausencia, y es cuando se percatan de su doble identidad.
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El cónsul reconoce que la familia de la joven, lo contactó apenas el día 31, y por su mediación se levantaron las denuncias de desaparición, y de un presunto secuestro del cual habrían sido objeto los tres centroamericanos.
La denuncia D-I/1997/2020 establece que Mary Lucero Mescco Molina fue vista por última vez cuando salió de la cárcel municipal de Atotonilco El Alto. El Instituto Nacional de Migración también certificó su ingreso desde agosto de 2019 al país, con ocasión de un proceso legal de patria potestad de su hija, quien se encuentra con su padre en Ecatepec, Estado de México.
Malacara Ortiz de Montellano, también presentó una denuncia ante la Fiscalía General de la República (FGR) Delegación Jalisco, radicada en el expediente
FED/JAL/ GDL/0003547/2020, a fin de que se conociera del caso, y se determinara una eventual participación de la delincuencia organizada.
En tanto, el Fiscal jalisciense Gerardo Octavio Solis Gómez, informó en rueda de prensa que los familiares de las víctimas ya rindieron su declaración ante el agente del Ministerio Público de la Fiscalía Especializada, y confirmó también, que el vehículo Nissan Versa en el que viajaban los peruanos y el mexicano fue asegurado por la autoridad municipal porque está involucrado en un hecho delictivo.
Un historial de enredos
El fiscal reconoció que la investigación inició con varias imprecisiones, ya que originalmente se asentaron otros nombres de quienes supuestamente eran mexicanos, y la indagatoria se tornó incongruente.
Dijo que las esposas de los hombres contactaron a una abogada que contrataron por 60 mil pesos para hacerse encargarse del caso.
Agregó que un supuesto novio de la joven peruana desaparecida, Mary Mescco, telefoneó a su familia para informar ella y sus acompañantes estaban secuestrados, y que él iba a ser el intermediario para tratar de salvar el secuestro, de ahí que los familiares, estuvieron haciendo una serie de depósitos a unas cuentas bancarias por alrededor de 250 mil pesos mexicanos, “consideramos que nuevamente se volvió a incurrir, por alguien cercano a las víctimas en un acto de defraudación a la familia, dado que no existieron datos de que realmente haya sido un negociador o haya intervenido en la liberación de estas personas”, expuso el Fiscal, quien informó que ya se interrogó al alcalde de Atotonilco, Cruz Carrillo, y a los policías que efectuaron la detención.
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