El cuerpo de la mujer que fue encontrado a un costado de la autopista México-Cuernavaca, en el límite de la Ciudad de México y el estado de Morelos, es el de Mónica Citlalli Díaz Reséndiz, la maestra de inglés de 30 años que desapareció el 3 de noviembre pasado en el municipio de Ecatepec, confirmaron las fiscalías generales del Estado y de la Ciudad de México.
La corporación mexiquense indicó que familiares de la víctima se trasladaron a las instalaciones de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJ) y reconocieron su cuerpo.
La vestimenta que portaba es la misma con la que salió de su casa ubicada en el municipio de San Salvador Atenco, además, las cicatrices que tenía en el antebrazo izquierdo y en una pierna corresponden a las de ella.
Personal de la fiscalía capitalina realizará la autopsia para saber las causas de la muerte y determinar el tiempo que llevaba sin vida. Hasta la tarde de ayer el cuerpo continuaba en el anfiteatro de la fiscalía desconcentrada en la alcaldía Tlalpan.
Las corporaciones de ambas entidades iniciaron una carpeta de investigación: la mexiquense por la desaparición, y la capitalina por feminicidio.
El cadáver lo encontraron en el kilómetro 40 de la autopista México-Cuernavaca, tras reportar la presencia de un cuerpo en esa zona boscosa de la alcaldía Tlalpan, elementos de la Guardia Nacional se hicieron cargo y dieron parte a la Fiscalía de Feminicidios.
El cuerpo de la víctima se encontró en bolsas negras apenas tapadas por una sábana, la cual fue detectada por pobladores. Según el boletín de búsqueda, la maestra portaba pantalón azul, camisa a rayas y un saco azul, mismas que portaba el cadáver.
Después de que se reportó el hallazgo, personal de la fiscalía mexiquense se trasladó a las instalaciones de la Ciudad de México para identificar si el cuerpo que se encontró sería el de Mónica Citlalli. También se notificó sobre el hallazgo a los familiares de la docente.
Recibieron mensajes extraños desde su celular
La última vez que vieron a la joven de 30 años fue el jueves 3 de noviembre, cuando salió de su casa para dirigirse su trabajo en la escuela Quick Learning, ubicada en San Juan Alcahuacan, en Ecatepec.
Sus compañeros informaron que no se presentó a trabajar. Sus seres queridos realizaron la denuncia de su desaparición y se elaboró una ficha de búsqueda.
Desde su ausencia se dedicaron a buscarla y en las redes sociales difundieron su foto para que la población participara en su localización.
El lunes realizaron un bloqueo en la vía Morelos para exigir celeridad en la búsqueda: “Queremos que nos faciliten los videos de dónde desapareció, porque son unos metros del Oxxo a la escuela y es de donde ya no se supo nada. Quiero que busquen a mi hija y regrese conmigo”, exigió entonces Fausta Reséndiz Moran, madre de Mónica.
Afirmó que el día de la desaparición de su hija recibieron extraños mensajes desde su teléfono celular en los que supuestamente ella avisaba que se trasladaría a Hidalgo.
No lo creyó, pues sabía que tenía que dar clases la mañana de ese jueves. Luego de ese mensaje no se supo más de ella.
La FGJEM le informó ese día a la familia que se emprendieron diversos actos de investigación, fueron activados los protocolos de Búsqueda Odisea y el de Alba Estado de México, y se pidió la colaboración de autoridades estatales y municipales en la localización de la joven.
En noviembre de 2019, EL UNIVERSAL dio cuenta que entre la frontera de la alcaldía Tlalpan y el estado de Morelos se ubica el poblado de Parres, donde no hay vigilancia y se han encontrado decenas de cadáveres.