Seis militares murieron y dos más resultaron heridos tras una explosión en la frontera Jalisco-Michoacán.
Una explosión atribuida a una mina artesanal provocó la muerte de seis militares y dejó a dos más gravemente heridos en la zona limítrofe entre los estados de Jalisco y Michoacán, de acuerdo con reportes de medios nacionales que citan a fuentes oficiales.
El incidente ocurrió el martes en una región cercana a los municipios de Cotija, Michoacán, y Jilotlán de los Dolores, Jalisco, un territorio en constante disputa entre el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y grupos criminales locales.
Según los primeros informes, un vehículo militar patrullaba un camino de terracería cuando fue alcanzado por la explosión de un artefacto explosivo improvisado. Aunque se presume que fue una mina colocada por el crimen organizado, otras versiones señalan que los soldados estaban en medio de un enfrentamiento armado, y que el explosivo fue activado durante el intercambio.
Los dos militares que sobrevivieron a la explosión pero resultaron heridos de gravedad fueron trasladados en helicóptero a un hospital, donde se reportan estables dentro de su estado crítico.
Tras el ataque, fuerzas federales y estatales desplegaron un operativo en la región, en busca de los responsables y para asegurar el área ante la posibilidad de más artefactos explosivos.
Hasta el momento, el Gabinete de Seguridad Federal no ha emitido una postura oficial sobre el ataque, aunque se espera un pronunciamiento en las próximas horas.
Este trágico hecho refleja la creciente violencia en la región occidente del país, donde los grupos delictivos han intensificado el uso de tácticas de guerra, como explosivos improvisados, para enfrentar a las fuerzas de seguridad.
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