Las paredes y pisos del Palacio de Gobierno quedaron marcados con mensajes de protesta, algunos escritos incluso con sangre.
Sinaloa. -Centenas de personas irrumpieron en el Palacio de Gobierno de Sinaloa, exigiendo la renuncia del gobernador Rubén Rocha Moya y justicia para Gael y Alexander, niños de 9 y 12 años asesinados junto a su padre, Antonio, el pasado 19 de enero, por sicarios que intentaron robarles su vehículo.
La marcha, liderada por el maestro Víctor Aispuro, director de la escuela de las víctimas, reunió no solo a familiares y compañeros de los niños, sino también a cientos de ciudadanos cansados de la creciente violencia en el estado.
Un llamado contundente contra la violencia
La manifestación comenzó en la escuela con el simbólico gesto de soltar globos blancos. Sin embargo, la indignación llevó a los asistentes a marchar hacia el Palacio de Gobierno, clamando frases como: “¡Fuera Rocha, narcogobierno, asesino!.
Las paredes y pisos del lugar quedaron marcados con mensajes de protesta, algunos escritos incluso con sangre. Ante la negativa de diálogo y el cierre de puertas por parte de empleados y policías estatales, los manifestantes forzaron la entrada y llegaron al patio del edificio gubernamental.
Indignación por la falta de respuesta gubernamental
Pese a la insistencia, Rocha no salió a dialogar. Esto encendió más los ánimos, llevando a los manifestantes a intentar ingresar al despacho del gobernador. Rompieron plafones y muebles hasta que se logró conformar una comisión liderada por la madre de los niños, recibida con gritos de “¡No estás sola!”.
Antes de retirarse, los inconformes montaron un altar en memoria de las víctimas.
Desde la captura de Ismael El Mayo Zambada y Joaquín Guzmán López en julio de 2024, la pugna entre “Los Mayos” y “Los Chapitos” ha desatado una escalada de violencia que cerró el año con más de 994 homicidios dolosos y 29 feminicidios.
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