Las protestas fueron motivadas por el asesinato de dos niños, Alexander y Rafael, junto con su padre Antonio, un crimen que conmocionó a la sociedad sinaloense.
Sinaloa.- El gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, respondió a las manifestaciones ciudadanas realizadas el fin de semana, destacando que “el enemigo común es la delincuencia” y no las autoridades.
Las protestas fueron motivadas por el asesinato de dos niños, Alexander y Rafael, junto con su padre Antonio, un crimen que conmocionó a la sociedad sinaloense. Durante su conferencia semanal, Rocha afirmó compartir la indignación y el agravio de los ciudadanos y reiteró su compromiso con el respeto hacia las manifestaciones.
"Somos un gobierno que no reprime. Nuestro reconocimiento y respeto absoluto hacia quienes protestan", declaró.
Acciones de seguridad
El mandatario resaltó que las fuerzas federales, estatales y municipales trabajan de manera conjunta para enfrentar la ola de violencia. Informó sobre la implementación de operativos especiales para rescatar a personas privadas de la libertad y combatir el robo de vehículos, con la participación de la Guardia Nacional y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana.
En cuanto al caso del asesinato de los niños y su padre, Rocha aseguró que el gobierno mantiene contacto con la madre de la familia y avanza en estrategias de inteligencia e investigación para esclarecer el crimen.
Sobre las demandas de renuncia
Respecto a las peticiones para su destitución, el gobernador recordó que existen mecanismos legales para llevar a cabo un proceso de revocación de mandato, aunque en un intento previo no se alcanzaron las firmas necesarias.
"El pueblo pone y el pueblo quita. Pero eso debe hacerse bajo los mecanismos establecidos, no a través de gritos", enfatizó.
Rocha Moya hizo un llamado a la sociedad para trabajar en conjunto contra la delincuencia. "Hagamos causa común por Sinaloa. Ninguno de ustedes está solo en esta lucha", subrayó.
El gobernador concluyó reafirmando que no incrementará su seguridad personal, a pesar de los daños sufridos en recientes actos de inconformidad. "El bienestar y la paz de Sinaloa deben ser nuestra prioridad", finalizó.