Este plan contempla, por primera vez, el uso de iglesias, ubicadas en zonas violentas, para recolectar armas de fuego a cambio de incentivos económicos que pueden llegar hasta 26 mil pesos.
CDMX.- La Basílica de Guadalupe se convirtió en el principal centro de acopio de armas del programa nacional “Sí al Desarme, Sí a la Paz”, lanzado por la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, con el objetivo de reducir los índices de violencia en el país.
Este plan contempla, por primera vez, el uso de iglesias, principalmente católicas, ubicadas en zonas violentas, para recolectar armas de fuego a cambio de incentivos económicos que pueden llegar hasta 26 mil pesos.
Durante el evento de inauguración, Sheinbaum declaró: “Consiste en que, sin investigar a nadie, si hay un arma en el hogar se entregue. Se reciben recursos económicos a cambio y el arma se destruye. Ese es el objetivo: que no haya armas en nuestro país”.
Estrategia de seguridad
El plan de desarme se enmarca dentro de la nueva estrategia de seguridad de Sheinbaum, la cual está basada en cuatro ejes principales:
- Atención a las causas de la violencia
- Consolidación de la Guardia Nacional
- Uso de inteligencia contra el crimen
- Coordinación entre autoridades federales y estatales
Según datos oficiales, alrededor de 200 mil armas ingresan anualmente a México desde Estados Unidos, de las cuales el 74% son confiscadas por las autoridades mexicanas. La titular de la Secretaría de Gobernación (Segob), Rosa Icela Rodríguez, explicó que se realizarán jornadas de desarme en iglesias de diversas denominaciones y brigadas “calle por calle” y “casa por casa”.
Rodríguez también aseguró que el proceso es totalmente anónimo y que no se indagará el origen de las armas. El personal de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) será el encargado de recibir y destruir inmediatamente el armamento entregado, que puede incluir desde pistolas y revólveres hasta lanzamisiles y granadas.
Relación de la iglesia y Sheinbaum
El programa también representa un acercamiento entre Sheinbaum y la Iglesia católica, con quien había tenido diferencias en el pasado. El rector de la Basílica, Efraín Hernández, declaró: “Este es un día histórico porque la presencia de la presidenta nos da testimonio de su preocupación por la paz en México”.
El Gabinete de Seguridad informó que los homicidios dolosos en México disminuyeron un 16.3% en el primer trimestre del gobierno de Sheinbaum, pasando de un promedio de 87 víctimas diarias en septiembre a 72.8 en diciembre.
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