Sinaloa, Durango y Sonora suman tres casos de niños que estuvieron involucrados con el consumo de fentanilo y metanfetaminas, pero uno de ellos falleció. Las primeras víctimas fueron bebés de un año y 10 meses de edad, mientras que la tercera fue un niño de seis años.
En cuanto al bebé de 10 meses de edad, autoridades de la ciudad fronteriza de Nogales, Sonora, se involucraron en la atención del menor que fue llevado por sus padres al presentar un fuerte daño en su salud. Al llegar al nosocomio los galenos refirieron que tenía fentanilo en su cuerpo.
Las muestras de fentanilo fueron localizadas en el pañal del bebé una vez que tuvo una evacuación. Los médicos del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) pudieron estabilizarlo y así logró sobrevivir. Cuatro pastillas de fentanilo estaban en el pañal del bebé.
En el segundo caso, trascendió que la víctima fue un menor de seis años en Gómez Palacio, Durango. Las autoridades de la Procuraduría de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes del DIF del Estado, señalaron que el niño fue internado al estar intoxicado. Las pruebas mostraron que el menor tenía tres tipos de droga en su organismo.
El niño finalmente fue desintoxicado y quedó en resguardo de las autoridades de Durango. Mientras que, en el caso del bebé de un año, el pasado viernes 3 de noviembre su familia fue a una reunión familiar donde el bebé no pudo resistir los efectos del fentanilo y falleció.
El hecho se presentó en la colonia 6 de enero en Culiacán, Sinaloa. El pequeño había comido una salchicha que, de acuerdo con el parte médico, estaba impregnada con la droga.
Por otra parte, se presentó el fallecimiento del niño por consumir fentanilo en Sinaloa, donde se reporta el mayor número de casos de menores con este químico en el cuerpo. Al respecto, el gobernador del estado, Rubén Rocha, no mencionó si los menores ingirieron la droga o cómo fue que se expusieron al fentanilo, pero sostuvo que, en lo que va de año, un total de cuatro niños han sido tratados en Sinaloa por este motivo.
Según el gobernador, se trata de “un contagio ocasional” de los menores por haber tenido contacto con algún adicto o con personas que trabajan en lugares clandestinos, donde se fabrican las píldoras de fentanilo.
El secretario de Salud de Sinaloa, Cuitláhuac González, expresó que los niños parecen haber estado expuestos al fentanilo en dos eventos diferentes la semana pasada, y que se espera que el menor de cuatro años sea dado de alta del hospital pronto. También rechazó la posibilidad de que los niños pudieran haber consumido dulces con droga.