Rusia amenazó con desplegar armas nucleares en y alrededor de la región del Mar Báltico si Finlandia y Suecia se unen a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) a medida que aumentan las tensiones alimentadas por la invasión a Ucrania del presidente Vladímir Putin.
“En este caso, no se puede hablar de un estatus no nuclear para el Báltico”, dijo Dmitri Medvédev, subjefe del Consejo de Seguridad de Rusia y expresidente, en un publicación de Telegram, lo que sugiere que Rusia podría desplegar misiles Iskander, armas hipersónicas y barcos con armas nucleares en la región.
Los comentarios de Medvedev se encuentran entre las amenazas más detalladas que Rusia ha emitido sobre la posibilidad de que sus vecinos del noroeste se unan a la alianza después de décadas de permanecer al margen.
Pero tanto Finlandia como Suecia dijeron esta semana que están reconsiderando la cuestión a raíz de la invasión de Ucrania por parte de Rusia.
Las amenazas no tienen peso porque Rusia ya mantiene armas nucleares en su enclave de Kaliningrado en el Mar Báltico, dijo el jueves el ministro de Defensa lituano, Arvydas Anusauskas, al servicio de noticias BNS.
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, declinó comentar sobre la posibilidad de que se desplieguen armas nucleares en la región del Báltico, pero dijo que Putin ya ordenó al ejército preparar planes para reforzar las defensas a lo largo de las fronteras occidentales de Rusia.
Medvedev dijo que esperaba que prevaleciera la “razón” y que los países decidieran no unirse a la alianza.
La frontera de Rusia con Finlandia se extiende por más de mil 300 kilómetros, más que la longitud total de su frontera con los actuales miembros de la OTAN. Si los países se unen a la alianza, “tendremos que fortalecer seriamente nuestras fuerzas terrestres y antiaéreas y desplegar fuerzas navales sustanciales en la cuenca del Golfo de Finlandia”, dijo Medvedev.
Aunque las iniciativas para considerar la membresía en la OTAN tomaron fuerza en ambos países solo después de la invasión, Medvedev dijo que la acción de Rusia no fue la causa. Al mismo tiempo, sugirió que si bien mantener a Ucrania fuera de la alianza occidental era un objetivo clave de la operación de Rusia allí, el Kremlin ve la situación con la región de Finlandia y Suecia de manera diferente.
“No tenemos disputas territoriales con esos países como las que tenemos con Ucrania”, dijo. “Por esa razón, el precio de su membresía para nosotros es diferente”.