El G7 aplicará “urgentemente” un tope a los precios del petróleo ruso y pidió una “amplia coalición” de países que participen en la medida, según un comunicado publicado este viernes por el grupo.
“El límite de precios se fijará en un nivel basado en una serie de datos técnicos y será decidido por toda la coalición antes de su aplicación”, escribieron los siete países industrializados en el comunicado, asegurando que los precios se comunicarían más adelante “públicamente de forma clara y transparente”.
En el texto, los ministros de Finanzas de las naciones del G7 no han detallado el precio límite. Únicamente han señalado que la cifra se decidirá con arreglo a un abanico de detalles técnicos. Además, estos precios se revisarán en caso de ser necesario.
El club de países asegura que esta medida está “específicamente diseñada” para reducir los ingresos de Rusia y su capacidad de financiar la guerra, al tiempo que limita el impacto en los precios globales de energía.
No obstante, el viceprimer ministro de Rusia, Alexander Novak, ya avisó el jueves de que Rusia no exportaría petróleo a ningún país que se adhiera a esta limitación de precios.
El G7 ha invitado a todos los países que quieran a aportar comentarios e ideas sobre el diseño y la implementación del límite de precios.
“Buscamos establecer una amplia coalición para maximizar su efectividad e instamos a todos los países que todavía busquen importar petróleo ruso a que se comprometan a hacerlo a precios iguales o inferiores al del límite”, recoge el comunicado del G7.
Según los datos de la Agencia Internacional de la Energía, entre marzo y julio Rusia ingresó 95.000 millones de dólares (94.870 millones de euros) de sus exportaciones de petróleo y gas solo a la Unión Europea, casi el doble que en años anteriores.