A medida que las tropas de Vladimir Putin recrudecen los ataques contra la población civil, la destrucción en la ciudad ucraniana de Mariupol, bajo asedio ruso desde hace 16 días, es “colosal” y se calcula que el 80% de las viviendas han quedado destruidas, mientras 30.000 personas han podido abandonar la ciudad los dos últimos días con su propio transporte, informó este jueves el ayuntamiento local.
“Según estimaciones preliminares, alrededor del 80% del parque de viviendas de la ciudad ha sido destruido, de las cuales casi el 30% no se puede restaurar. La situación en Mariupol es crítica”, escribió el consistorio en su canal de Telegram.
Recordó que la ciudad ha estado bajo bloqueo durante 16 días y que más de 350.000 residentes de Mariupol continúan escondidos en almacenes y sótanos “ante el continuo bombardeo de las fuerzas de ocupación rusas” que lanzan, como media, “de 50 a 100 bombas aéreas por día”.
En los últimos dos días, los habitantes de Mariupol comenzaron a evacuar la ciudad en transporte privado, en dirección a Berdyansk y a Zaporiyia, tras la apertura de un corredor humanitario.
“En total, unos 6.500 coches salieron de la sitiada Mariupol... En total, unas 30.000 personas salieron en su transporte propio”, afirmó.
Por otra parte, el Ayuntamiento señala que sigue sin haber información sobre posibles víctimas del bombardeo ruso perpetrado el miércoles contra un teatro en la ciudad, donde más de un millar de mujeres y niños estaban refugiados y que quedó reducido a escombros, pero donde el refugio antiaéreo del edificio resistió al ataque.
La ciudad apenas cuenta con agua, medicinas o alimentos básicos y carece de gas y electricidad debido a los intensos bombardeos.
Por su parte, el portavoz de la ONU, Stéphane Dujarric, reportó en su rueda de prensa diaria que al menos 928.000 ucranianos están sin suministro eléctrico por culpa de la guerra desatada tras la invasión rusa.
La cifra fue comunicada por el mismo ministerio de Energía de Ucrania a las agencias humanitarias que siguen trabajando en el país, precisó Dujarric.
Además, 259.000 personas han perdido la conexión al gas natural.
La situación es especialmente crítica en las ciudades de Chernihiv, Donetsk, Mykolaiv, Zaporiyia y Kabatsa, especificó el portavoz.
Además, citó un informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que denunció que 43 instalaciones médicas han sido atacadas durante la guerra, algo que condenó de forma categórica al recordar que según el derecho internacional “los recintos médicos y sus trabajadores y transportistas deben ser respetados” por los bandos en conflicto.
Este jueves, el presidente del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), Peter Maurer, dijo que “la situación en Mariupol no debe convertirse en el futuro de Ucrania”, donde se encuentra para evaluar las necesidades humanitarias más urgentes en los centros urbanos que se han convertido en los campos de batalla de la guerra iniciada con la invasión de Rusia.
En la ciudad costera de Mariupol, en el sureste de Ucrania, el sufrimiento de los civiles ha sido particularmente intenso a causa de los constantes bombardeos y el asedio de las fuerzas rusas, que no permiten la entrada segura de alimentos, agua potable o medicamentos para los cientos de miles de personas que se encuentran allí.
Maurer dijo que la devastación que ha observado en su trayecto a Kiev es amplia y recordó a las partes de este conflicto que “incluso sin un cese de las hostilidades se pueden hacer cosas para limitar el sufrimiento de los civiles”.
Pese a la condena internacional, Putin recrudece sus ataques a civiles en Ucrania. En las últimas horas se reportaron más de 75 muertos. El mayor baño de sangre en las últimas horas ocurrió en Chernihiv. Allí, las autoridades reportaron que 53 cuerpos llegaron a la morgue debido a los bombardeos de en el norte del país.
Chernihiv, cerca de las fronteras con Bielorrusia y Rusia, fue una de las primeras ciudades ucranianas atacadas por las fuerzas rusas en el inicio de la invasión hace tres semanas.
“El enemigo está exponiendo la ciudad a la artillería sistémica y los ataques aéreos, destruyendo la infraestructura civil de Chernihiv”, informó Viacheslav Chaus, jefe de la Administración Estatal de la región en un mensaje en Facebook.
En tanto, al menos 21 personas murieron y 25 resultaron heridas el jueves en un bombardeo ruso en la ciudad de Merefa, en el este de Ucrania, informó la fiscalía regional.
Disparos de artillería alcanzaron una escuela y un centro cultural el jueves por la mañana en esa localidad, a las afueras de Kharkiv, anunció la Fiscalía en Facebook. Diez de los heridos están graves.