Las economías de Norteamérica llegan con retos y oportunidades, México y Canadá observan con atención los posibles ajustes en las políticas comerciales.
Estados Unidos de América.- Los inversores globales se preparan para el segundo mandato de Donald Trump, marcado por una agenda proempresarial, pero con cautela ante sus políticas proteccionistas y comerciales.
Entre las propuestas destacan la reforma fiscal, el impulso a las criptomonedas y cambios en los aranceles comerciales.
Perspectiva económica de México, Estados Unidos y Canadá
Las economías de Norteamérica llegan con retos y oportunidades. México y Canadá observan con atención los posibles ajustes en las políticas comerciales, mientras Estados Unidos experimenta un mercado en constante cambio, impulsado por el crecimiento en sectores tecnológicos y financieros.
El mercado está expectante por las señales que podrían influir en las decisiones de inversión. Según Sam Stovall, estratega de CFRA Research, “la incertidumbre sigue siendo clave, especialmente en temas como aranceles o controles migratorios”.
Michael Arone, de State Street Global Advisors, considera que las medidas más significativas podrían implementarse gradualmente, evitando un impacto inmediato en los mercados.
Políticas clave del mandato
- Reforma comercial y aranceles: Posibles aumentos podrían generar inflación, afectando bonos y acciones.
- Criptomonedas: Trump busca posicionarse como el “criptopresidente”, creando un consejo regulador y expandiendo el acceso financiero.
- Relajación regulatoria: Las expectativas de menor regulación han beneficiado al sector bancario y las criptodivisas.
Impacto en los mercados financieros
El S&P 500 mostró volatilidad durante su primer mandato, aunque registró un crecimiento total del 68%. En sus primeros 100 días en 2017, subió un 5%, estableciendo un precedente optimista para los mercados.
El inicio de este mandato estará marcado por órdenes ejecutivas en energía e inmigración, lo que podría influir en las estrategias de inversión a corto plazo.
Trump promete consolidar su visión económica proempresarial, con reformas que impactarán tanto a Estados Unidos como a sus socios comerciales. Los mercados estarán atentos a cada movimiento, especialmente en áreas críticas como comercio, criptomonedas y regulación.
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