El Departamento de Policía de Nueva York ha detenido a Frank James, un hombre de 63 años como sospechoso del tiroteo que dejó ayer 29 heridos en una concurrida estación de metro del condado de Brooklyn. El implicado, que fue descrito por varios testigos como un hombre de raza negra que mide aproximadamente 1 metro y 67 centímetros, salió huyendo del metro con una máscara de gas y un chaleco de construcción de color naranja.
Según la cadena de noticias CNN, James fue arrestado en el barrio del East Village, al sur de Manhattan, por dos agentes, después de que un transeúnte lo identificara en la calle, lo fotografiara y colgara la imagen en Twitter, aunque la policía aún no ha desvelado los detalles.
El Departamento de Policía de Nueva York había anunciado una recompensa de hasta 50.000 dólares para quien proporcionase información sobre lo sucedido o el paradero de esta persona. Según informa AP, los agentes habían identificado a James tras encontrar en el lugar del tiroteo una tarjeta de crédito a su nombre con la que fue alquilada una furgoneta de la empresa U-Haul relacionada con el ataque que la policía localizó poco después en las inmediaciones de la estación.
Frank James había grabado numerosos vídeos en un canal de YouTube, en uno de los cuales declaraba estar "lleno de odio, lleno de rabia y lleno de amargura", según el rastreo de su cuenta efectuado por el diario The New York Post.
La prensa se hace hoy eco de la actividad de James en la web, principalmente en un canal de Youtube creado por él llamado "Prophet of Truth 88" (profeta de la verdad), que hoy cuenta con 3.480 suscriptores y está lleno de un contenido de odio racial y violento expresado en largos vídeos de más de media hora de duración.En esa cuenta, James posteó en el último mes numerosos vídeos con títulos como "Nacido en un manicomio", "El código del ghetto", "Que vienen los rusos", "Predador negro" y otros sin sentido aparente pero que tenían de forma recurrente un destinatario: el alcalde de Nueva York, Eric Adams.
En uno de ellos, James le dice: "Señor alcalde, soy víctima de tu programa de salud mental. Tengo 63 años y estoy lleno de odio, lleno de rabia y lleno de amargura", y asegura haber sido diagnosticado con una enfermedad mental e internado en un centro donde asistió a "espectáculos de terror". Según dice, había sido víctima de violencia en esos centros, "no violencia física, sino la clase de violencia que un niño sufre en la escuela y que le llevan a tomar una pistola y disparar a los cabrones", señala en uno de los vídeos.
En sus vídeos, vuelve con frecuencia al desprecio con que los negros son tratados en la sociedad. "¿Por qué un negro sigue vivo en este planeta? Aparte de recoger algodón o caña de azúcar o tabaco... - se pregunta-. Así que el mensaje para mí esta claro: Debí haber cogido una pistola y ponerme a disparar a los cabrones", repite.
Precisamente, Adams ha pedido este miércoles a los ciudadanos que estén "vigilantes", pero dijo que no hay pruebas de que el tirador tuviera un cómplice, y añadió: "Parece que actuó solo".
Los hechos ocurrieron en plena hora punta, sobre las 8.30 de la mañana, cuando al parecer un hombre armado detonó una granada de humo en el interior de un vagón de la línea R antes de salir al andén y disparar a bocajarro contra varios transeúntes en el interior de la estación de metro de la calle 36, en el barrio de Sunset Park.
En un principio medios como el New York Post informaron de que se habían encontrado varios artefactos caseros sin detonar en las inmediaciones del andén, pero la policía confirmó después que los agentes no encontraron ningún explosivo. Lo que sí recogieron en la estación fue una pistola y varios cargadores de alta capacidad. El arma, una pistola Glock, estaba aparentemente encasquillada, un problema que pudo impedir al tirador causar daños aún mayores, según dijeron al diario NY Post fuentes policiales, informa Efe.
Según el primer balance oficial ofrecido por las autoridades desde el lugar de los hechos, al menos 29 personas resultaron heridas (según cifra el Washington Post), diez de ellas por impactos de bala.
La jefa del Departamento de Policía, Keechant Sewell, confirmó que hasta el momento lo ocurrido no está siendo investigado como un acto de terrorismo. Por su parte, el presidente estadounidense, Joe Biden, ya fue informado sobre lo ocurrido y el Gobierno contactó de inmediato con el alcalde de la ciudad, Eric Adams, para ofrecer toda la ayuda que sea necesaria, según anunció la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki.
La gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, condenó el ataque en el metro y agradeció el trabajo de los servicios de emergencia. "Esta mañana, los neoyorquinos se disponían a acudir a sus lugares de trabajo en una mañana relativamente normal", según la dirigente demócrata. Pero esa sensación de tranquilidad se vio brutalmente interrumpida por un hombre desalmado al que no le importó asaltar a sus vecinos", añadió.
El incidente de este martes en el condado de Brooklyn se produce en medio de un creciente aumento de la violencia en el sistema de transporte público de Nueva York. Desde el pasado enero se han registrado más de 600 denuncias de delitos mayores cometidos en la red de metro de la Gran Manzana, lo que supone un aumento del 66 por ciento respecto al mismo periodo del año anterior, según las estadísticas facilitadas por la policía local.