Internacional

España se abstiene de participar en la toma de posesión de Nicolás Maduro

Esta decisión se enmarca en un contexto de creciente tensión política en Venezuela, donde el régimen ha intensificado las acciones contra la oposición.

El Gobierno de España confirmó que no enviará ningún representante a la toma de posesión del presidente venezolano Nicolás Maduro, programada para el próximo 10 de enero, siguiendo la misma postura adoptada durante la investidura anterior en 2019.

Esta decisión se enmarca en un contexto de creciente tensión política en Venezuela, donde el régimen ha intensificado las acciones contra la oposición.

El opositor Edmundo González Urrutia, quien asegura haber ganado las elecciones del pasado 28 de julio, manifestó su intención de presentarse en Caracas el día de la ceremonia para asumir la Presidencia.

Escalada de represión y declaraciones de personas no gratas

La decisión española coincide con un endurecimiento del régimen de Maduro, que ha incrementado la vigilancia y detenciones arbitrarias de familiares de González Urrutia y de la excandidata vicepresidencial María Corina Machado.

En semejante, la Asamblea Nacional venezolana, controlada por el oficialismo, aprobó por unanimidad declarar personas no gratas a nueve expresidentes latinoamericanos que han mostrado su respaldo al opositor González Urrutia.

Los expresidentes vetados son:

  • Andrés Pastrana (Colombia)
  • Mario Abdo Benítez (Paraguay)
  • Vicente Fox y Felipe Calderón (México)
  • Mireya Moscoso y Ernesto Pérez Balladares (Panamá)
  • Jorge Quiroga (Bolivia)
  • Jamil Mahuad (Ecuador)
  • Laura Chinchilla (Costa Rica)

La Asamblea solicitó que dichos expresidentes sean tratados como una “fuerza extranjera que intenta invadir” en caso de que decidan acompañar a González Urrutia en su intento de jurar como presidente el viernes.

Contexto internacional y postura de España

Desde el inicio de la crisis política en Venezuela, España ha mantenido una postura crítica hacia el régimen de Maduro. Bajo el liderazgo del socialista Pedro Sánchez, el gobierno español ha optado por no reconocer los procesos electorales recientes, debido a la falta de condiciones democráticas y la ausencia de garantías.

La situación en Venezuela continúa generando preocupación internacional, mientras diversas naciones evalúan cómo responder ante los últimos acontecimientos.