Seis pasajeros aún permanecen desaparecidos: dos estadounidenses y cuatro británicos.
Este miércoles, las labores de búsqueda en el naufragio del yate de lujo "Bayesian" en Sicilia llevaron al descubrimiento de cuatro cuerpos adicionales entre los restos de la embarcación, aumentando el número total de víctimas confirmadas a cinco. El hallazgo de estos cuerpos se realizó por la tarde, y aún se encuentran en proceso de identificación.
El lunes, encontraron el primer cadáver que pertenecía a un hombre que fue localizado cerca del lugar del naufragio, elevando el número total de muertos a cinco. La noticia del hallazgo provocó una rápida actividad en el puerto de Porticello, desde donde varias embarcaciones se dirigieron al sitio del accidente, regresando más tarde con bolsas para cadáveres.
Los expertos han señalado que el "Bayesian", un yate de 56 metros de eslora, está diseñado con puertas herméticas que podrían haber creado bolsas de aire, proporcionando una posible ventana de supervivencia.
Jean Baptiste Souppez, especialista en ingeniería naval, recordó el caso del marinero Harrison Okene, quien sobrevivió casi tres días en una bolsa de aire tras el hundimiento de su barco en 2013.
El "Bayesian", que se hundió rápidamente el lunes por la mana durante una fiesta a bordo, transportaba a 12 personas y 10 miembros de la tripulación.
Mientras que 15 personas, incluyendo a nueve tripulantes, fueron rescatadas, seis pasajeros aún permanecen desaparecidos: dos estadounidenses y cuatro británicos.
La Fiscalía de Termini Imerese, en Sicilia, ha abierto una investigación para determinar las causas del hundimiento del yate. Se está interrogando al capitán del "Bayesian", James Catfield, de 51 años, quien fue sometido a un interrogatorio de más de dos horas en un hotel cercano al lugar del incidente.
La investigación busca esclarecer por qué el velero se hundió en un minuto, cuando otro barco en la misma área no sufrió daños significativos a pesar de las condiciones meteorológicas adversas.
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