Las delegaciones de Rusia y Ucrania iniciaron la tercera ronda de negociaciones en Bielorrusia. Ambas partes confirmaron su arribo y agencias internacionales dan cuenta del inicio de las conversaciones, que estaba previsto para las 16 hora local (14:00 GMT).
Las partes dialogan en la zona conocida como Belovezhskaya Pushcha, en la frontera entre Polonia y Bielorrusia.
“Negociaciones con la Federación Rusa. La tercera ronda. A partir de las 16.00 hora de Kiev. La delegación (ucraniana) sin cambios”, había confirmado en un breve tuit el asesor presidencial y delegado ucraniano en el diálogo, Mijaíl Podolyak.
La primera ronda de negociaciones entre las delegaciones de Rusia y Ucrania se llevó a cabo el 28 de febrero, y la segunda, el 3 de marzo, ambas en territorio bielorruso.
Tras el segundo encuentro, las partes llegaron a un acuerdo para el establecimiento de corredores humanitarios para la evacuación de civiles, la entrega de alimentos y medicinas, unas medidas que no han llegado a implementarse con éxito.
Este es uno de los puntos que se volverán a tratar, aunque urge el cese del fuego en medio de las masacres de ciudadanos ucranianos que buscan huir de la guerra y son alcanzados por la artillería rusa.
Las condiciones de Rusia
Como nunca antes había sucedido, Rusia ha sido explícita sobre sus exigencias para cesar el fuego. El portavos del Kremlin, Dimitri Peskov, dijo a la agencia Reuters que hay tres condiciones básicas para eso: que Ucrania cambie su constitución para consagrar la neutralidad, reconozca a Crimea como territorio ruso y a las repúblicas separatistas de Donetsk y Lugansk como territorios independientes,
Fue la declaración rusa más explícita hasta el momento de los términos que quiere imponer a Ucrania para detener lo que llama su “operación militar especial” en Ucrania, que ahora atraviesa su día número doce. Para este lunes se espera la tercera reunión para tratar de buscar una salida a la sanguinaria incursión del ejército ruso en el país vecino.
Pero la invasión ya se ha cobrado la vida de miles de civiles y el Kremlin parece dispuesto a seguir con la matanza si no se atiende a sus pretensiones, las cuales, según Peskov, son conocida por Ucrania: “Y se les dijo que todo esto se puede parar en un momento”.
El portavoz del Kremlin insistió en que Rusia no busca hacer más reclamos territoriales sobre el país vecino.