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Internacional

Negociaciones entre Israel y Hamás se estancan: mediadores buscan salvar la tregua

Si no comienzan las negociaciones para la segunda fase, no habrá extensión del alto el fuego.

Las conversaciones sobre la segunda fase del alto el fuego entre Israel y Hamás, mediadas por Egipto, Catar y Estados Unidos, no lograron avances en la última ronda celebrada en El Cairo.

Según una fuente egipcia, las negociaciones "no fueron buenas y no hubo ningún progreso", lo que pone en riesgo la continuación de la tregua, cuya primera fase concluye hoy.

Uno de los principales obstáculos es la exigencia de Hamás de un alto el fuego total y la retirada del Ejército israelí de la Franja de Gaza. En contraste, la delegación israelí se niega a retirarse y a dar por terminada la guerra.

Ante la falta de consenso, los mediadores pidieron más tiempo para intentar resolver las diferencias. No obstante, advirtieron a Israel que, si no comienzan las negociaciones para la segunda fase, no habrá extensión del alto el fuego.

Condiciones de Israel para continuar la tregua

Otra fuente egipcia reveló que Israel condiciona la continuación del cese al fuego a la liberación de todos los rehenes vivos. Si no se cumple esta demanda, el gobierno israelí amenaza con suspender el flujo de ayuda humanitaria a Gaza.

"Estamos dispuestos a mantener el alto el fuego, pero sólo si hay negociaciones rápidas y efectivas sobre la liberación de rehenes en los próximos días", citó la fuente egipcia sobre la postura de Israel.

Medios israelíes informaron que la delegación del país regresó a Tel Aviv, aunque podrían reanudar las negociaciones de manera remota. Sin embargo, el portavoz de Hamás, Hazem Qasem, afirmó que "actualmente no hay conversaciones en curso" tras la fallida ronda en El Cairo.

Según el acuerdo de 42 días, mañana domingo debía comenzar la segunda fase, en la que Hamás liberaría a más rehenes, mientras que Israel excarcelaría a presos palestinos y retiraría sus tropas del corredor de Filadelfia, clave para el control de Gaza.

Con las negociaciones en punto muerto, la posibilidad de que el conflicto se intensifique nuevamente sigue latente.