Se reportaron 29 fallecimientos de personas de la tercera edad noruegas tras recibir la vacuna contra COVID-19 de la farmacéutica estadounidense Pfizer, sin embargo, la Agencia de drogas de Noruega aclaró que sólo murieron 23 adultos mayores, pero ¿la vacuna fue la causante de las muertes?
Las 23 muertes se registraron después del 14 de enero, a unos cuántos días de que las personas habían recibido la vacuna de Pfizer y BioNTech.
La Agencia Noruega de Medicamentos (NOMA) descartó que los efectos secundarios de la vacuna fueran alarmantes, sin embargo, señaló que sólo pueden presentarse desenlaces fatales en pacientes “frágiles”.
“Los informes sugieren que las reacciones adversas comunes a las vacunas de ARNm, como fiebre y náuseas, pueden haber contribuido a un desenlace fatal en algunos pacientes frágiles”, detalló en un comunicado.
También anunció que fueron evaluadas 13 de las 23 muertes, y concluyeron que los efectos secundarios asociados con la vacuna pueden haber contribuido a reacciones graves entre pacientes “ancianos y débiles”.
Por su parte, el director médico de la agencia afirmó que no hay certeza de que la vacuna anti-covid haya provocado la muerte de más de dos decenas de personas.
“Puede ser una coincidencia, pero no estamos seguros. No existe una conexión segura entre estas muertes y la vacuna”, explicó.
Por lo anterior, el Instituto Nacional de Salud Pública actualizó su guía de vacunación Covid-19 con consejos más detallados sobre la inmunización de las personas de la tercera edad que son vulnerables.
“Todas las muertes que ocurren durante los primeros días de la vacunación se evalúan cuidadosamente. No podemos descartar que las reacciones adversas a la vacuna que ocurren dentro de los primeros días después de la vacunación (como fiebre y náuseas) pueden contribuir a un curso más grave y un desenlace fatal en pacientes con una enfermedad subyacente grave”, avisó la NOMA.
Mientras tanto, las farmacéuticas Pfizer y BioNTech trabajan en coordinación con la agencia noruega de medicamentos para esclarecer la muerte de los adultos mayores.
“La NOMA confirma que el número de problemas hasta el momento no es alarmante y está en línea con las expectativas. La NOMA evaluará minuciosamente todas las muertes reportadas para determinar si estos casos están relacionados con la vacuna. El Gobierno noruego también considerará ajustar sus instrucciones de vacunación para tener más en cuenta la salud de los pacientes”, indicó Pfizer en un comunicado.
Hace unas semanas el diario The Local Norway informó que el Statens Legemiddelverk Norway, organismo encargado de regular los medicamentos en Noruega, advirtió que las personas mayores de 80 años y con enfermedades terminales son las que corren con mayor riesgo de sufrir efectos secundarios fatales con la vacuna contra la COVID-19.
