Países occidentales se comprometieron el jueves a aportar más de 1.500 millones de euros (1.550 millones de dólares) en efectivo, equipos y formación para reforzar las capacidades militares de Ucrania en su guerra contra Rusia, declaró el ministro de Defensa danés, Morten Bodskov.
El dinero, prometido por un grupo de 26 países en una conferencia en Copenhague, se utilizará para suministrar las armas, misiles y municiones existentes, aumentar la producción de armas para Ucrania, entrenar a los soldados ucranianos y desminar las zonas devastadas por la guerra en el país.
“Seguiremos ayudando a Ucrania en sus necesidades militares”, declaró Bodskov a periodistas al término de la conferencia, que reunió a los ministros de Defensa europeos para debatir el apoyo a largo plazo a la defensa del país contra la invasión rusa.
Los ministros de Defensa de Polonia, Eslovaquia y la República Checa se mostraron dispuestos a ampliar la producción de sistemas de artillería, municiones y otros equipos militares para Ucrania, dijo Bodskov.
Reino Unido, que ya ha donado sistemas de armamento avanzados a Ucrania y ha impartido formación militar a miles de sus tropas, prometió el jueves 300 millones de euros adicionales, incluyendo sistemas de cohetes de lanzamiento múltiple y misiles guiados de precisión M31A1 que pueden atacar objetivos a una distancia de hasta 80 km.
“El presidente Putin habría apostado que al llegar agosto (...) todos nos habríamos aburrido del conflicto y la comunidad internacional se habría ido en otra dirección. Pues bien, hoy es la prueba de lo contrario”, declaró el Secretario de Defensa del Reino Unido, Ben Wallace.
Los compromisos se producen después de que el gobierno de Kiev hizo repetidos llamamientos a Occidente para que envíe más armas, incluida la artillería de largo alcance, en su intento de cambiar el rumbo de la invasión rusa que comenzó el 24 de febrero.
Ucrania dijo a principios de este mes que había recibido otra entrega de armas pesadas de alta precisión de Alemania y Estados Unidos.
Al respecto, el Gobierno de Joe Biden anunció el lunes otros 1.000 millones de dólares en ayuda militar para Ucrania, prometiendo lo que será la mayor entrega hasta ahora de cohetes, municiones y otras armas para las fuerzas ucranianas.
En el paquete están incluidos cohetes tipo HIMARS (High Mobility Artillery Rocket Systems), miles de proyectiles de artillería, morteros, Javelins y otras municiones y equipos.
Comandantes militares estadounidenses han dicho que los HIMARS y las piezas de artillería han sido claves en los intentos ucranianos por tratar de impedir que Rusia conquiste más territorio.
El anuncio eleva a unos 9.000 millones de dólares el total de la asistencia militar entregada a Ucrania por la administración del presidente Joe Biden desde que Rusia invadió a su vecino a fines de febrero.
“En cada etapa de este conflicto, nos hemos concentrado en darle a los ucranianos lo que necesitan, dependiendo de las condiciones cambiantes en el campo de batalla”, expresó Colin Kahl, subsecretario de defensa para políticas, al anunciar el nuevo paquete de ayuda.
Moscú, que ha acusado a Occidente de alargar el conflicto dando a Ucrania más armas, dice que está llevando a cabo una “operación militar especial” en Ucrania destinada a salvaguardar la seguridad de Rusia contra la expansión de la OTAN.
En los últimos cuatro meses, Rusia se ha centrado en tratar de capturar la región del Donbás en el este de Ucrania, donde separatistas prorrusos controlan algo de territorio y se han autoproclamado independientes. Las fuerzas rusas han avanzado gradualmente, al tiempo han lanzado cohetes y misiles a fin de inhibir los movimientos de las tropas ucranianas en otros lugares.