Los republicanos en la Cámara de Representantes preparan una supervisión agresiva al gobierno de Joe Biden, una vez que asuman la mayoría el próximo año, con un enfoque particular en los tratos comerciales de su hijo, Hunter Biden, la migración ilegal y los orígenes del COVID-19.
Los republicanos no tendrán suficientes votos para avanzar en las prioridades legislativas clave si no hay una aceptación demócrata, pero su supervisión de las agencias gubernamentales podría poner a los demócratas a la defensiva y disminuir el apoyo a Biden de cara a 2024.
Se espera que el representante Jim Jordan, republicano por Ohio, sea el próximo presidente del Comité Judicial de la cámara. Jordan ayudó a formar y lideró el House Freedom Caucus ultraconservador y votó el 6 de enero de 2021 para oponerse al conteo de los votos en Pensilvania. El presidente Trump apoyaba a Jordan, al que le otorgó el honor civil más alto de la nación, la Medalla Presidencial de la Libertad.
El Comité Judicial se encarga de la supervisión de los Departamentos de Justicia y Seguridad Nacional y de cuestiones como la delincuencia, la migración y la protección de las libertades civiles (como el COVID).
Se espera que el representante James Comer, republicano por Kentucky, se desempeñe como presidente del Comité de Reforma y Supervisión de la cámara y ha dejado claro que investigar al hijo del Biden será una de sus prioridades. Los republicanos dicen que su investigación de los tratos comerciales de Hunter Biden es para “determinar si estas actividades comprometen la seguridad nacional de Estados Unidos y la capacidad del presidente para liderar con imparcialidad”.