Además de las conversaciones con los mandatarios ruso y ucraniano, Trump también dialogará con líderes de la OTAN, esperando que la jornada sea “productiva”.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha confirmado que este lunes 19 de mayo sostendrá conversaciones telefónicas con los presidentes de Rusia, Vladimir Putin, y Ucrania, Volodimir Zelenski, en un intento por promover un posible de alto al fuego en el conflicto armado que ha devastado Ucrania desde 2022.
El anuncio fue realizado a través de su cuenta oficial en la red social Truth Social, donde precisó que los diálogos comenzarán a las 10:00 de la mañana, hora local de Washington D.C. Además de las conversaciones con los mandatarios ruso y ucraniano, Trump también dialogará con líderes de la OTAN, esperando que la jornada sea “productiva”.
“Espero, en el mejor de los casos, un alto al fuego y el fin de esta guerra tan violenta, que jamás debió haber comenzado”, escribió Trump, reafirmando su postura crítica sobre el conflicto.
Las conversaciones se dan en un contexto sensible, justo después de la reunión que delegaciones de Rusia y Ucrania sostuvieron en Estambul el pasado viernes, la primera en tres años. En dicha reunión se acordó un intercambio de 2,000 prisioneros de guerra y la entrega de condiciones preliminares para un posible cese al fuego.
En una reciente entrevista, Trump señaló que tanto Putin como Zelenski están desgastados por la guerra. Describió al presidente ruso como “cansado” de un conflicto que ha deteriorado su imagen internacional, y cuestionó las decisiones del líder ucraniano, sugiriendo que sus constantes pedidos de ayuda lo han dejado en una posición debilitada.
“Creo que Putin está cansado de todo esto y para él no pinta bien”, dijo Trump. “Hay que pensar que si sus tanques no se hubieran atascado en el barro camino a Kiev, la guerra habría terminado en cinco horas”.
Cuando se le preguntó si consideraba a Putin un obstáculo para la paz, evitó responder directamente. En su lugar, señaló que Zelenski está enfrentando una situación cada vez más asfixiante. “No tiene las cartas en la mano. Está enfrentándose a un ejército enorme y sus habilidades están disminuyendo”, concluyó el presidente estadounidense.
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