Con la llegada de la temporada primavera-verano, los niveles de radiación UV aumentan, lo que puede provocar daños severos en la piel. Una exposición prolongada al sol acelera el envejecimiento y puede desencadenar cáncer de piel.
El colágeno y su relación con la radiación UV
El colágeno es una proteína esencial que brinda elasticidad y firmeza a la piel. Según el Instituto Nacional del Cáncer de EE.UU., existen cuatro tipos de colágeno, y uno de ellos está presente en las capas dérmicas.
Una investigación de la National Library of Medicine reveló que la radiación UV altera los genes del colágeno, provocando su degradación y remodelación, especialmente en la dermis papilar.
Consecuencias de la exposición solar
- Daño en el colágeno: La radiación UV rompe las fibras de colágeno, causando pérdida de elasticidad y firmeza.
- Radicales libres: Se generan compuestos que destruyen las estructuras de la piel, favoreciendo la aparición de arrugas y manchas.
- Envejecimiento prematuro: La piel pierde hidratación y tonicidad, lo que acelera el proceso de envejecimiento.
Cómo proteger tu piel del sol
Para evitar la descomposición del colágeno, es fundamental adoptar medidas preventivas:
✔️ Usar protector solar con un factor de protección alto (FPS 50+).
✔️ Vestir ropa adecuada, como sombreros y gafas de sol.
✔️ Evitar la exposición solar en horas de alta radiación (de 11:00 a 16:00 hrs).
✔️ Incluir colágeno en la dieta a través de alimentos o suplementos para reforzar la piel.
Cuidar el colágeno es clave para una piel joven y saludable. ¡Protégete del sol!
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