Foto: Cortesía

Artículo

El alimento mexicano que protege tu corazón y podría salvar tu vida

Nunca es mal momento para voltear a ver a ese músculo incansable que late día y noche por nosotros: el corazón.

A veces pensamos que los infartos son cosa de adultos mayores, pero en México ya están apareciendo en gente de 30 a 35 años, y eso prende todos los focos rojos. ¿La raíz del problema? Mala alimentación, sedentarismo y estrés, una mezcla peligrosa que cada vez se normaliza más.
La buena noticia es que gran parte de estos eventos son prevenibles, y el primer paso está justo en la mesa. Comer mejor no significa prohibirse todo, sino aprender a elegir. Desayunar variado, evitar el pan dulce diario, hidratarse con agua natural y reducir azúcar puede hacer la diferencia más grande (y más rápida) de lo que imaginamos.

El aguacate: mexicano, delicioso y cardioprotector

Entre los alimentos estrella aparece uno que amamos desde siempre: el aguacate. En tacos, en guacamole, en ensalada o directo con tortilla... siempre está ahí, pero pocos saben que también es un guardían del corazón.
La American Heart Association ha encontrado que mejorar la calidad de la dieta puede reducir el riesgo de infartos, y estudios muestran que quienes consumen aguacate dos veces por semana tienen menor probabilidad de enfermedades cardiacas. No es magia: son grasas buenas, nutrientes y equilibrio.
El lado oscuro está en los excesos: embutidos, carnes procesadas, botanas altas en sodio y refrescos elevan el colesterol, incrementan la presión arterial y favorecen la obesidad. Y si sumamos alto sodio + azúcar + sedentarismo = riesgo de hipertensión, diabetes e infarto cerebral o cardiaco.

Moverse y elegir mejor: la fórmula real para vivir más

No necesitas dietas extremas para proteger tu corazón. Pequeños cambios diarios valen oro: caminar 30 minutos al día, mover el cuerpo, bajar el estrés, hidratarse y consumir alimentos naturales. La prevención sí está en nuestras manos, porque los infartos no avisan.
Cuidar tu corazón es cuidarte a ti, pero también a quienes te aman. Lo que decidas hoy, lo agradecerás mañana.