La disputa entre Elon Musk y OpenAI ha escalado a un nuevo nivel, con la compañía de inteligencia artificial acusando al magnate de acoso en un intento de debilitar su posición en el sector. La batalla legal se lleva a cabo en un tribunal federal de California, donde Sam Altman, director de OpenAI, ha solicitado al juez la desestimación de la demanda presentada por Musk.
Por qué OpenAI acusa a Elon Musk de acoso
OpenAI ha sido contundente en su respuesta a las acusaciones de Musk, presentando una moción el 8 de octubre para desestimar la demanda interpuesta por el empresario. En su presentación, OpenAI sostiene que el litigio forma parte de una “campaña cada vez más fanfarrona” de Musk para acosar a la empresa y ganar una ventaja competitiva para su propia compañía, xAI. Según la moción, Musk ha utilizado el sistema judicial para atacar a OpenAI de manera reiterada, argumentando que sus acusaciones son “inverosímiles” y carecen de base legal.
Antecedentes de la disputa
El conflicto no es reciente; la relación entre Musk y OpenAI comenzó en 2015 cuando cofundó la empresa con Sam Altman y otros. OpenAI fue concebida como una organización sin fines de lucro, pero en 2018, surgieron desacuerdos cuando la compañía adoptó un enfoque híbrido que permitía generar ingresos. Musk dejó OpenAI alegando desacuerdos sobre su dirección, revelando su intención de tomar el control o fusionar la empresa con Tesla para aprovechar avances tecnológicos.
Qué pasará con la demanda de Musk contra OpenAI
La audiencia para la moción de desestimación está programada para el 12 de noviembre en el tribunal federal de Oakland, California. En esa fecha, el juez decidirá si las acusaciones de Musk tienen mérito o si se desestimará la demanda como solicita OpenAI. Este caso no solo impacta a las partes involucradas, sino que podría sentar un precedente importante para otras empresas en el desarrollo de tecnologías avanzadas, reflejando los riesgos y oportunidades que presenta la inteligencia artificial.
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