Jesús Murillo Karam, exprocurador General de la República, fue detenido este viernes un día después de que se diera a conocer nueva información sobre el caso Ayotzinapa con el que se le vincula. Será recluido en el Reclusorio Norte de la Ciudad de México y ellos son los políticos que se encuentran presos en el mismo penal.
Esta prisión está ubicada en la alcaldía Gustavo A. Madero y opera desde el 16 de agosto de 2016. Tiene una capacidad de 6 mil 092 internos pero los últimos reportes indican que esta cifra ya fue rebasada.
Los políticos detenidos en el Reclusorio Norte de la CDMX
Emilio Lozoya
El exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex) fue reingresado a prisión preventiva por el caso Odebrecht luego de que el juez de control José Artemio Zúñiga Mendoza determinara, en una nueva audiencia, que existe riesgo de fuga.
Jorge Luis Lavalle
Luis Lavalle es un exsenador de PAN acusado de haber recibido sobornos por parte del, en ese entonces director de Pemex, Emilio Lozoya, para aprobar la reforma energética en el sexenio del presidente Enrique Peña Nieto.
Javier Duarte de Ochoa
Duarte fue exgobernador de Veracruz y fue aprehendido en el 2017. Se le acusó de encabezar una red delictiva con la que desvio recursos equivalentes a 223 millones de pesos.
Juan Collado Mocelo
Se trata de un abogado de élite dentro del mundo de la política mexicana, que fue internado por cargos de delincuencia organizada en la modalidad de operaciones con recursos de procedencia ilícita.
Grimaldo Gerardo Cajero Morales
Cajero Morales era Fiscal de Investigación Territorial en Azcapotzalco y fue aprehendido por los delitos de falsificación de documentos, así como falsedad de declaraciones.
¿Por qué fue detenido Jesús Murillo Karam?
Jesús Murillo Karam, exprocurador General de la República, fue aprehendido este viernes luego de la nueva información que arrojó que la desaparición de los 43 normalistas, aquella noche del 26 de septiembre del 2014, se trató de un crimen de Estado.
Murillo Karam fue el autor de La Verdad Histórica, una versión en la que señalaba que los estudiantes de la Normal Isidro Burgos fueron quemados en el basurero de Cocula. Aunque más tarde sus dichos fueron echados abajo por las autoridades de la administración actual.
Esta explicación señalaba que un grupo de policías cometió un acto de corrupción al detener a los estudiantes y posteriormente entregarlos al al cártel Guerreros Unidos. Éste habría sido el encargado de asesinarlos y cremarlos, para después tirar sus restos en el río San Juan.
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