La Profeco soltó un estudio que dejó a más de uno levantando ceja: varias marcas de frijoles refritos y enteros enlatados traen más grasa y menos proteína de lo que la gente suele creer.
Y eso pega directo en quienes los comen diario pensando que son tan saludables como los frijoles hechos en casa. El análisis revisó 18 marcas, desde frijoles bayos y negros enteros hasta los clásicos refritos que todos hemos comprado alguna vez.
En el estudio se evaluó el contenido de proteína, grasas totales, grasas saturadas, calorías y el tipo de grasa utilizada. También revisaron si las etiquetas dicen la verdad sobre lo que traen. Y sí, hubo sorpresas. Algunas marcas mostraron niveles de grasa saturada más altos de lo esperado, algo que definitivamente no es buena noticia si consumes estos productos seguido. Además, muchas tenían un contenido proteico bastante bajo, lo que rompe la idea de que los frijoles enlatados son un sustituto perfecto de los frijoles caseros.
Entre las marcas con mayor cantidad de grasa saturada, Profeco mencionó productos de Chata, La Costeña, La Sierra y La Morena, con cifras que llegan hasta los 4.4 g por cada 100 g en algunas presentaciones. Esto significa que, aunque los frijoles enlatados son prácticos, no siempre son la opción más sana.
Lo que dice Profeco sobre consumir frijoles enlatados
Profeco también revisó otros factores importantes: el contenido neto real, la masa drenada en los frijoles enteros y si el etiquetado cumple la normativa. Algo que destaca es el tipo de grasa usada: algunas marcas emplean aceites vegetales, mientras que otras usan manteca de cerdo, lo cual importa un montón si tienes alergias o sigues una dieta específica.
El análisis también profundizó en los carbohidratos, calorías y en qué tan fiel es el empaque a lo que hay dentro. Todo esto es clave porque, aunque los frijoles enlatados son súper comunes en México, un consumo constante de productos altos en grasa saturada puede aumentar el riesgo de problemas cardiovasculares. Y si aparte tienen poca proteína, no cumplen su papel nutrimental como deberían.
Por qué los frijoles naturales siguen siendo la mejor opción
Expertos citados por Profeco explican que los frijoles cocinados desde cero tienen más proteína vegetal, más fibra y un mejor perfil nutricional en general. También contienen minerales esenciales como hierro, potasio, magnesio y zinc, que ayudan en funciones vitales del cuerpo. Su índice glucémico bajo los hace ideales para personas con diabetes, porque no disparan el nivel de azúcar en sangre.
Prepararlos en casa también tiene ventajas prácticas: puedes evitar conservadores, colorantes y exceso de sodio, muy común en productos procesados. Además, tú decides cuánta grasa le pones y de qué tipo, y el sabor final suele ser mil veces mejor. Sin contar que es más barato y sostenible.
Profeco remató diciendo que esta información es clave para la salud pública, porque el frijol es un alimento básico en México. Su estudio, disponible para consulta pública, busca que más gente tome decisiones informadas y cuide mejor su alimentación.
Más noticias
- El perejil esconde un poder que pocos conocen: así puede transformar tu salud
- Casas baratas del Infonavit: la oportunidad que muchos están dejando pasar
- Guadalupe-Reyes sin culpa: disfruta las fiestas sin subir de peso
- ChatGPT Go llega a México desde $110 y Rappi lo da gratis hasta 6 meses
- Profeco destapa lo que no sabías de tus frijoles enlatados favoritos
- Virus del Oropuche no se propagaría por mosquitos en el sureste de EU













