El vapeo, considerado por muchos como una alternativa para dejar de fumar, se ha convertido en una amenaza directa para la salud, provocando daños pulmonares graves y otras complicaciones en el organismo.
Así lo señaló el Dr. Gerardo Díaz Sánchez, especialista en psiquiatría y académico de la Universidad Autónoma de Guadalajara (UAG), durante la conferencia “Abuso de alcohol, tabaco y vapeadores”, enfocada en la prevención de adicciones en jóvenes.
Brote de lesiones pulmonares por vapeadores
El académico recordó que existe un brote documentado de Lesión Pulmonar Asociada al Vape (EVALI), detectado desde 2019 por el Centro de Control de Enfermedades (CDC) en Atlanta, Estados Unidos.
“Se registraron más de 2,600 casos y 68 muertes confirmadas, con una edad promedio de 35 años”, explicó el especialista.
Los síntomas más frecuentes incluyen tos seca, dolor torácico, dificultad respiratoria e insuficiencia pulmonar aguda, que en casos graves requiere ventilación mecánica o puede causar la muerte.
Efectos del vapeo en el cuerpo humano
El Dr. Díaz Sánchez detalló que los vaporizadores afectan múltiples sistemas del organismo, más allá del daño pulmonar:
- Aparato respiratorio: causa inflamación, daño tisular y dificultad para respirar.
- Sistema cardiovascular: incrementa el riesgo de infartos, embolias y aterosclerosis.
- Aparato reproductor masculino: reduce la masa testicular y afecta la producción de testosterona.
- Sistema oncológico: puede originar tumores malignos en pulmón, piel, intestino, peritoneo y vejiga.
- Salud bucal: altera la microbiota oral y provoca lesiones en encías y mucosa.
- Embarazo: eleva el riesgo de malformaciones congénitas y retraso en la implantación del embrión.
- Riesgo de explosiones: algunos dispositivos han explotado durante su uso, generando heridas faciales, pérdida dental y fracturas.
Composición tóxica del vapeador
Los vaporizadores contienen hasta 80 sustancias químicas, muchas de ellas altamente tóxicas. Entre sus componentes se encuentran nicotina, glicerina y propilenglicol, además de formaldehído, metales pesados (zinc, cromo, níquel) y compuestos volátiles cancerígenos.
Estas sustancias, al calentarse durante la inhalación, liberan aerosoles que ingresan directamente a los pulmones, provocando daño celular e inflamación crónica.
Preocupante aumento del vapeo en jóvenes
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición, 17% de los adolescentes mexicanos entre 10 y 19 años ha probado el vapeo, y al menos 5% lo utiliza de manera regular.
A nivel mundial, la Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que más de 100 millones de personas vapean actualmente, lo que representa un reto creciente para las políticas públicas de salud.
Llamado a la prevención y educación
El especialista enfatizó la importancia de informar y prevenir el consumo de vapeadores entre jóvenes, ya que la mayoría desconoce los riesgos reales que implican estos dispositivos.
“El vapeo no es una alternativa segura, es una nueva forma de adicción con graves consecuencias para la salud”, concluyó el Dr. Díaz Sánchez.