Comando armado asalta a escoltas en Palmar de Bravo y los deja sin armas

Los hechos ocurrieron en la madrugada del domingo, cuando los escoltas regresaban de un traslado que había transcurrido sin incidentes. Fue en la carretera Cuesta Blanca–Cuacnopalan, a la altura del convento de Cuesta Blanca, donde el convoy fue interceptado de forma repentina.
De acuerdo con los primeros reportes, al menos cuatro camionetas tipo pick up se atravesaron en el camino y obligaron a las unidades de seguridad a detenerse. De ellas descendió un grupo de aproximadamente 20 hombres armados, quienes portaban chalecos tácticos, cascos balísticos y armas cortas y largas. La escena fue rápida y calculada, sin dejar margen de reacción para las víctimas.

Despojo de armas y equipo sin que hubiera personas lesionadas

Los agresores encañonaron y sometieron a los escoltas, obligándolos a descender de las unidades bajo amenazas. Durante el asalto, los delincuentes se apoderaron de dos pistolas calibre 9 milímetros, además de chalecos antibalas, cascos balísticos y teléfonos celulares del personal de seguridad privada.
A pesar de la violencia del operativo, no se reportaron personas lesionadas, un dato que fue confirmado por las autoridades. Antes de retirarse, los responsables dieron una instrucción clara a los escoltas: continuar su camino rumbo a la autopista, asegurándoles que más adelante encontrarían sus teléfonos. Minutos después, los dispositivos fueron localizados abandonados en la batea de una camioneta, lo que permitió a las víctimas comunicarse y pedir ayuda.

Denuncias, operativo y una investigación en curso

Una vez fuera de la zona de riesgo, los escoltas solicitaron apoyo a los servicios de emergencia y posteriormente acudieron por sus propios medios ante el Ministerio Público para presentar la denuncia correspondiente. Al sitio también arribaron elementos de la Guardia Nacional, quienes brindaron apoyo y trasladaron a las víctimas a la cabecera municipal.
Las autoridades informaron que se mantiene un operativo de seguridad y una investigación en curso para esclarecer los hechos y dar con el paradero de los responsables. El caso vuelve a poner sobre la mesa la vulnerabilidad en tramos carreteros y la necesidad de reforzar la seguridad en rutas estratégicas de la región.
Mientras avanzan las indagatorias, el asalto a escoltas en Palmar de Bravo se suma a una serie de incidentes que reflejan la audacia de grupos armados y el reto permanente para las corporaciones de seguridad en Puebla.