Trabajadores de mantenimiento vial de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) realizaron un macabro hallazgo la mañana del viernes 11 de julio en la carretera Izúcar de Matamoros–Tehuitzingo, a la altura de la comunidad Los Amates, en el municipio de Izúcar de Matamoros, Puebla.
Durante labores rutinarias de pintado y limpieza, entre la maleza crecida por las lluvias, encontraron extremidades humanas y un cráneo, aparentemente pertenecientes a un hombre adulto. El hallazgo fue reportado al 911 y movilizó a diversas corporaciones de seguridad.
Despliegan operativo con binomios caninos
Elementos de la Policía Municipal, la Secretaría de Seguridad Pública del Estado (SSP) y agentes de la Agencia Estatal de Investigaciones (AEI) implementaron un operativo de búsqueda que incluyó binomios caninos, con el objetivo de localizar más restos o evidencia en el lugar.
La zona, ubicada a pocos metros del paraje conocido como "Los Enamorados", fue acordonada para permitir las diligencias correspondientes.
Restos trasladados a Puebla para análisis forense
Debido a que el Servicio Médico Forense (Semefo) de Izúcar de Matamoros permanece cerrado por mantenimiento, los restos fueron embalados y trasladados a la capital poblana, donde especialistas en medicina forense realizarán estudios para determinar el sexo, la identidad y la causa de muerte de la víctima.
De manera preliminar, se indicó que los restos no presentaban lesiones visibles, aunque sí estaban parcialmente deteriorados por la fauna local.
Fiscalía abre carpeta de investigación y mantiene hermetismo
La Fiscalía General del Estado de Puebla (FGE) abrió la carpeta de investigación FGEP/EAT/FIM/IZUCARMAT-I/020130/2025 para dar seguimiento al caso. Las autoridades aún no han confirmado si los restos corresponden a alguna persona reportada como desaparecida.
Hasta el momento, se mantiene hermetismo en torno a la investigación, y no se descarta ninguna línea de indagación. La FGE exhorta a quienes tengan información relacionada con este hallazgo a que se acerquen a las autoridades competentes.
Este hecho reaviva la preocupación por la violencia en carreteras del sur de Puebla y refuerza la exigencia de mayor vigilancia en las zonas rurales del estado.