Un macabro hallazgo sacudió a la comunidad de Guadalupe Enríquez este jueves por la mañana. Vecinos alertaron a las autoridades sobre un automóvil Nissan Tsuru gris abandonado en la autopista Puebla-Veracruz, kilómetro 193+00, con sangre que escurría de su cajuela.
Al lugar llegaron elementos de la Policía Municipal, Policía Estatal, Guardia Nacional y Ejército para asegurar la zona. Los peritos de la Fiscalía General del Estado (FGE) revisaron el vehículo y encontraron cuatro bolsas de plástico con restos humanos desmembrados. Los cuerpos, todos masculinos y aún sin identificar, fueron etiquetados como números 17, 18 y 19 en el anfiteatro de Tecamachalco. Junto a los restos, se halló una cartulina con un mensaje, lo que apunta a un ajuste de cuentas entre grupos delictivos.
La Fiscalía asumió el control de la investigación, sospechando que el hecho está vinculado a bandas locales de narcomenudeo que compiten por el control de la región. El vehículo y la cartulina fueron asegurados como evidencia clave, mientras que los cuerpos fueron trasladados al anfiteatro, donde se espera que sean identificados por sus familiares para avanzar en la investigación.