Verónica, mujer acusada de secuestro tras encontrar un teléfono, narra su experiencia en los separos de la Fiscalía y clama por justicia.
Tehuacán, Puebla.- Desde los separos de la Fiscalía Antisecuestros en Puebla, Verónica, una mujer de 49 años, acusada de secuestro tras encontrar un teléfono.
El 19 de octubre, tras visitar a unos familiares, Verónica encontró un iPhone sonando en la calle. Al llegar a su casa, decidió publicar en redes sociales que había encontrado el dispositivo y que lo entregaría a su dueño. A lo largo de la noche, recibió varias llamadas de personas que la identificaban como "Fredy", el dueño del teléfono.
A la mañana siguiente, múltiples patrullas rodearon su domicilio. Temiendo que algo malo había ocurrido, decidió llevar el teléfono a su trabajo en una lavandería. Sin embargo, cuando llegó, la policía entró en el local buscando el iPhone. A pesar de explicar cómo había encontrado el teléfono, Verónica fue golpeada y detenida.
“Me trataron como un delincuente”, expresó en su relato.
Verónica fue llevada en un convoy de patrullas, donde sufrió agresiones físicas por parte de los agentes. Al llegar a la Fiscalía, no le leyeron sus derechos, ni se le permitió hacer una llamada o recibir asistencia legal. Permaneció incomunicada toda la noche, sin saber el paradero de su familia que la buscaba.
El 21 de octubre, después de recibir apoyo de familiares y amigos, Verónica fue liberada. Un amparo por privación ilegal de la libertad y tortura permitió que se activara el protocolo de Estambul debido a las lesiones sufridas.
"Soy inocente, me trataron como a un delincuente", afirmó Verónica al reunirse con su familia.
Ahora, Verónica busca justicia y visibilizar su situación, resaltando que la acusación fue infundada. La experiencia la ha marcado, pero espera que su historia sirva para prevenir futuros abusos y arbitrariedades en el sistema. Su caso ha ganado atención pública, con apoyo de figuras políticas y organizaciones de derechos humanos.
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