El presidente Andrés Manuel López Obrador minimizó el retén, integrado por personas armadas en la carretera Badiraguato-Guadalupe y Calvo, en el Triángulo Dorado, que el viernes pasado sobrevoló.
“No pasa nada, no pasó nada afortunadamente”, dijo en breve entrevista en las inmediaciones de la presa Picacho.
Como parte de su gira de trabajo por el Triángulo Dorado, el viernes pasado, el Titular del Ejecutivo federal realizó un sobrevuelo para supervisar el avance de la construcción de la carretera en plena Sierra Occidental, que conectará a 10 municipios de Sinaloa, Durango y Chihuahua.
"¿Del incidente de ayer de los compañeros, supo algo de este retén?”, se le preguntó.
“Sí, sí, hoy en la mañana, no pasa nada, no pasó nada afortunadamente”, respondió.
Antes del rancho conocido como La Tuna, donde vive la señora María Consuelo Loera, madre de Joaquín El Chapo Guzmán, líder del Cartel de Sinaloa, preso en Estados Unidos, un grupo de 10 personas armadas detuvo por cinco minutos e indagó el vehículo donde viajaban representantes de medios de comunicación para cubrir la gira presidencial.
Eran civiles ataviados con chalecos antibalas, con hasta ocho cargadores, uniformes tipo militar, equipo de radiocomunicación, armas cortas y cuernos de chivo en tres camionetas sin placas desplegadas sobre la carretera.
En entrevista posterior, el Presidente rechazó que las organizaciones criminales controlen parte del territorio mexicano.
“No, no, eso lo piensan los conservadores. Yo no soy Felipe Calderón para que quede claro y no hay en el gobierno, ¿cómo se llama el que está preso en Estados Unidos?, Genaro García Luna”.
Aseguró que en su segundo día de gira de trabajo por Sinaloa se ha sentido muy contento y “seguro, seguro, seguro”, con gente muy trabajadora.
Sobre el incidente, el Titular del Ejecutivo federal señaló que en algunos lugares del país, no sólo en Sinaloa, hay personas que están actuando, “pensando que se debe cuidar una región que no lleven armas y a veces hay confusiones, pero en general todo bien”, insistió.
Sobre el uso de vestimenta tipo militar o táctica por parte de estos grupos, el presidente Andrés Manuel López Obrador señaló que eso no debe suceder.
“Eso sucede en Jalisco, sucede en otros partes, está mal, no debe suceder, pero no sólo es el caso de Sinaloa”, reconoció. Dentro de sus recorridos, acompañado por el gobernador Rubén Moya Rocha (Morena), López Obrador se comprometió a que marzo de 2024 las presas Picachos y Santa María funcionarán como hidroeléctricas y deberán producir energía eléctrica que beneficiará con energía y agua a casi 90 mil familias del sur de Sinaloa.