Sheinbaum explicó que, durante su conversación con Trump, abordó el tema de la seguridad, destacando la importancia de la cooperación entre ambos países en la lucha contra el tráfico de armas desde EE. UU. hacia México.
Claudia Sheinbaum, presidenta de México, rechazó la propuesta del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, de realizar una intervención militar en México para enfrentar a los cárteles de la droga. Trump había calificado a estas organizaciones como terroristas y sugirió una acción militar.
En su conferencia matutina, Sheinbaum destacó que México no aceptará ningún tipo de intervención en su territorio, subrayando la importancia de respetar la soberanía del país.
Durante una reciente conversación con Trump, Sheinbaum abordó temas de seguridad, incluyendo el tráfico de armas desde EE. UU. hacia México, un problema que el gobierno mexicano ha denunciado en diversas ocasiones.
Rechazo a la intervención militar
La presidenta explicó que el gabinete de seguridad de México, encabezado por Omar García Harfuch, está altamente capacitado y comprometido con la lucha contra el crimen organizado. Además, destacó la importancia de compartir información e inteligencia de manera respetuosa y en coordinación con las autoridades estadounidenses.
La mandataria dejó claro que el gobierno de México no está dispuesto a aceptar una invasión extranjera. Recordó que, durante la administración de Andrés Manuel López Obrador, se tomó la decisión de controlar la presencia de agencias estadounidenses en México, y esa postura se mantendrá bajo su liderazgo.
Además del tema de la intervención militar, Sheinbaum subrayó la importancia de abordar el tráfico de armas como una prioridad para México. El gobierno mexicano sigue trabajando en conjunto con Estados Unidos para combatir este problema que afecta directamente la seguridad del país.
Generación de empleo y crecimiento económico
En cuanto a los migrantes mexicanos, Sheinbaum aprovechó la oportunidad para resaltar su contribución a la economía de Estados Unidos. A propósito de las demandas de Trump sobre el control migratorio,
La presidenta presentó datos que muestran que aproximadamente el 80% de los ingresos de los migrantes mexicanos se invierten en bienes y servicios dentro de EE. UU. Este consumo tiene un impacto positivo en la economía estadounidense, con un estimado de 13 mil millones de dólares anuales que los migrantes indocumentados aportan al sistema de seguridad social, a pesar de no recibir beneficios.
Finalmente, Sheinbaum destacó que los migrantes mexicanos no solo son fundamentales para la economía, sino que también juegan un papel clave en la creación de empleos en EE. UU., generando entre uno y dos empleos adicionales por cada diez migrantes que ingresan a la fuerza laboral.