El sector hotelero de Acapulco, de acuerdo con la Secretaría de Turismo de Guerrero, reportó una ocupación del 31.7 por ciento.
La dependencia estatal especificó que la zona turística con mayor ocupación es la zona Dorada, con un 35.7%, seguido del sector Diamante con el 29.2 % y finalmente la parte Tradicional, con una concurrencia del 15.7 por ciento.
Otros municipios de la entidad gobernada por Héctor Astudillo que presentaron una afluencia turística considerable fueron Ixtapa-Zihuatanejo con un 40.5% y el centro platero de Taxco de Alarcón con el 23.9 por ciento.
Estos números resultan favorables para la industria turística, pues desde la llegada del COVID-19 a México, en febrero del año pasado, fue el sector más perjudicado derivado de las medidas restrictivas promovidas por el gobierno federal. Ya que la Jornada Nacional de Sana Distancia, implementada durante el inicio de la Fase 2 de la contingencia sanitaria, estipuló que serían sólo los sectores esenciales los que continuarían operando normalmente.
Aunado a esto, el aislamiento social recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la implementación de la sana distancia, dificultaron la reactivación del ramo turístico en todas sus vertientes. Esto quiere decir que las atracciones y sitios turísticos de México, las ruinas prehispánicas, los hoteles y muchos restaurantes se vieron obligados a cerrar por la presencia de la nueva cepa de coronavirus.
Cabe rescatar que las zonas turísticas de Guerrero no serían las únicas beneficiadas durante este periodo que se supone de asueto. Roberto Citrón Gómez, presidente de la Asociación de hoteles de Cancún, expresó que para las próximas vacaciones de Semana Santa se espera una ocupación de hasta el 60% en los hoteles de la región.
“Estamos a un 50% de ocupación y esperamos tener un aumento en las operaciones aéreas previo a la Semana Santa y durante la Semana Santa y esperamos llegar a un 55-60% de ocupación en los días pico; de jueves a domingo santo y esto va a aumentar el flujo de turistas”, dijo el empresario en entrevista con la presentadora de noticias de Televisa Denise Maerker.
Bajo la lógica epidemiológica, el hotelero puntualizó que Quintana Roo actualmente se encuentra en semáforo epidemiológico en amarillo, por lo que las autoridades han permitido operar a los centros de consumo con un mayor aforo, mientras que los antros continúan en funcionamiento, pero algunos de ellos han optado por dar servicio en terrazas o en áreas más abiertas.
“Siendo un destino turístico, en base a esas medidas de aforo es que se ha ido permitiendo que estos centros de entretenimiento como los que mencionaba Arturo Medina, hayan sido abiertos”, especificó.
A pesar de esto, el SARS-CoV-2 no deja de ser un riesgo en México. De acuerdo con el reporte de la Secretaría de Salud (SSa), publicado este jueves 1 de abril, en la república se han contabilizado 2,244,268 casos y 203,664 defunciones. En cuanto a la epidemia activa, la autoridad sanitaria calcula 30,603 casos activos. Esto quiere decir que son el número de pacientes que presentaron el cuadro sintomático de esta enfermedad en los últimos 14 días.
En cuanto a las entidades con más casos acumulados está la Ciudad de México con 39,420, seguido del Estado de México con 23,260. Por el otro lado, los estados de Guerrero y Quintana Roo mantienen un perfil bajo con 3,974 y 2,468, respectivamente.