Con pancartas, mantas y vapeando en el lugar, los manifestantes, en su mayoría jóvenes, defendieron la práctica argumentando que "vapear no es fumar".
A las afueras del Senado, donde este martes se discutirá la iniciativa de reforma enviada por la Cámara de Diputados para prohibir los vapeadores, cigarrillos electrónicos y el uso ilícito de fentanilo, usuarios de dispositivos electrónicos realizaron una protesta para demandar respeto a su consumo y abogar por una regulación adecuada.
Protesta pacífica y demandas
Con pancartas, mantas y vapeando en el lugar, los manifestantes, en su mayoría jóvenes, defendieron la práctica argumentando que "vapear no es fumar". En sus consignas destacaron frases como: “El vapeo salva vidas, no lo criminalicen", "Prohibido prohibir" y "Senadores no se equivoquen, regulémoslo ya"
Los asistentes pidieron una regulación justa en lugar de una prohibición absoluta, señalando que esta última solo incentivará el mercado negro y podría dejar el control de los productos en manos de criminales.
Salvador Gutiérrez, coordinador regional de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC), declaró que en México hay más de dos millones de usuarios de vapeadores, y calificó como desproporcionado que se compare el vapeo con el consumo de drogas adulteradas con fentanilo.
“Esta ley es restrictiva y prohibitiva. Pugnamos por regular más que prohibir, porque con la regulación se le ponen reglas al mercado. La prohibición solo generará un mercado ilícito, poniendo en riesgo a los consumidores”, señaló Gutiérrez.
Debate en el Senado
La reforma propuesta busca prohibir el uso y comercialización de vapeadores y cigarrillos electrónicos, argumentando riesgos a la salud pública. Sin embargo, los manifestantes insisten en que la regulación, más que la prohibición, es el camino adecuado para evitar el consumo clandestino y garantizar la seguridad de los usuarios.
El vapeo y los cigarrillos electrónicos han estado en el centro de un debate global debido a los riesgos potenciales para la salud y su creciente popularidad, especialmente entre jóvenes. En México, la discusión legislativa ha sido acompañada de protestas y controversias entre defensores del vapeo y sectores que promueven su prohibición.
Con el lema "Prohibido prohibir", los manifestantes buscan que los senadores tomen en cuenta sus demandas y analicen alternativas que permitan la regulación sin criminalizar su consumo.