Ciudad de México.- El coordinador de Morena en el Senado, Ricardo Monreal, dijo que el presidente Andrés Manuel López Obrador cumple con su compromiso y fortalece a la Comisión Federal de Electricidad mediante el acuerdo firmado con la empresa Iberdrola para adquirir 13 plantas generadoras de energía para generar mayor desarrollo para el país.
A través de un artículo publicado en sus redes sociales, el líder de la mayoría señaló que “de ser el patito feo y cojo del periodo neoliberal, la CFE será ahora la empresa productiva rectora de la nueva economía mixta mexicana”.
Monreal destacó que el pasado martes 4 de abril, el presidente López Obrador dio a conocer que su gobierno firmó un convenio con la empresa Iberdrola para adquirir 13 plantas generadoras de electricidad que posee esta compañía ibérica.
En términos técnicos, explicó el senador, se trata de una capacidad de generación eléctrica instalada de ocho mil 539 megavatios (MW) de los que ocho mil 436 corresponden a ciclos combinados (es decir, plantas de generación a partir de uso de gas y de vapor de agua), y 103 a un parque eólico terrestre.
Esto significa la venta del 80 por ciento de los activos de generación eléctrica de esa empresa en nuestro país, una operación que se acerca a los seis mil millones de dólares estadunidenses.
Y en los hechos, representa el regreso de la economía mixta a uno de los sectores estratégicos para la nación: el energético.
En el corto y mediano plazo, precisó Monreal, el presidente López Obrador señaló que con ello se resuelve todo el consumo de energía eléctrica que requiere nuestra nación, en pleno crecimiento económico. Lo más importante es que así se garantiza que no se incremente el precio de la luz a las y los consumidores, como desde hace cuatro años.
Además, afirmó que la institución que contará con la mayoría del capital de esta transacción será el Fondo Nacional de Infraestructura (FONADIN), que además refinanciará la operación.
Ésta no se agregará a la deuda pública del país, porque el Fondo se encuentra fuera del balance público, como apuntó la Secretaría de Hacienda.
La CFE será la encargada de operar esas plantas, lo cual le representará aumentar, en materia de generación eléctrica, del 39.6 por ciento al 55.5 por ciento del total de producción para todo el país, dejando el restante 44.5 por ciento al sector privado.
“De esta transacción hay que dejar en claro tres aspectos de relevancia:
1) La CFE no será empresa monopólica ni dominante en el sector eléctrico; continuará como EPE (Empresa Productiva del Estado), tal como la define nuestra Constitución.
2) La operación de compra no es una estatización, sino una operación mercantil de compra-venta entre el sector público y una empresa particular de escala global. El Gobierno de México no se apropia de las plantas de Iberdrola mediante un acto expropiatorio unilateral de fuerza, sino mediante una acción voluntaria de libre mercado.
3) Al ser mayoritaria, mas no única ni dominante, la participación de la CFE como EPE garantizará que se cumpla con el doble criterio de preservar la seguridad nacional de un sector estratégico de la economía, así como el de proporcionar un servicio público oportuno y a buen precio a la población usuaria”.
“Es necesario señalar que, si bien existían diferencias entre el Gobierno federal y la firma española, en virtud de la nueva política energética soberana y nacionalista de nuestro país; del reordenamiento del mercado eléctrico nacional para que exista verdadera competencia, se llegó a este acuerdo histórico”, indicó.
Asimismo, mencionó que es justo reconocer también que por medio del diálogo y la disposición de ambas partes se llevó a cabo este acontecimiento histórico que el presidente de la República ha calificado como una “nueva nacionalización”.