La reanudación de actividades no significa el fin de su lucha contra la reforma judicial.
Los jueces y magistrados federales acordaron reanudar sus actividades el próximo 28 de octubre, tras una votación que involucró a todos los circuitos judiciales del país. Según la Asociación Nacional de Magistrados de Circuito y Jueces de Distrito del Poder Judicial de la Federación (Jufed), la decisión de volver a las labores responde a la determinación libre y autónoma de los juzgadores, quienes priorizan el beneficio de la población. Sin embargo, mantendrán formas legítimas de protesta y resistencia en contra de la reforma judicial.
Condiciones para reanudar labores
La Jufed aclaró que, aunque los jueces han decidido reanudar actividades, si no se reciben respuestas concretas a las peticiones presentadas ante el Consejo de la Judicatura Federal por la base trabajadora y los titulares del Poder Judicial, no descartan volver a una suspensión de labores en el futuro.
Defensa del Estado de Derecho
La reanudación de actividades no significa el fin de su lucha contra la reforma judicial. Los jueces y magistrados han reiterado su compromiso de defender el Estado de Derecho y proteger los derechos humanos de la ciudadanía. Además, reafirmaron su unidad en la resistencia ante las acciones del Poder Ejecutivo y Legislativo, que consideran una amenaza a las libertades y garantías constitucionales de todos los mexicanos.
Exigencias al Consejo de la Judicatura y la Suprema Corte
La Jufed exigió que el Consejo de la Judicatura Federal cumpla su rol como órgano administrativo, respetando la autonomía del Poder Judicial y respondiendo a las demandas presentadas por los jueces. También hicieron un llamado a la Suprema Corte de Justicia de la Nación para resolver los medios legales interpuestos y restaurar el orden constitucional del país.
Apoyo nacional e internacional
Los jueces confían en contar con el respaldo de la sociedad mexicana, así como de organizaciones civiles, organismos internacionales y expertos constitucionalistas, quienes han mostrado su solidaridad ante los efectos de la reforma.
Esta lucha, advierten, continuará dentro de los cauces legales, en defensa de la Constitución y la independencia judicial, que consideran pilares fundamentales de la democracia en México.