Durante la Mañanera del Pueblo del 19 de diciembre, la presidenta Claudia Sheinbaum dejó claro que México no busca conflictos comerciales con ningún país, pese a la aprobación del paquete arancelario que eleva impuestos a productos de naciones sin tratado comercial con el país.
La mandataria explicó que esta decisión no fue improvisada, sino el resultado de un trabajo coordinado entre la Secretaría de Relaciones Exteriores, la Secretaría de Economía y el Senado.
Sheinbaum subrayó que la propuesta original sufrió cambios importantes tras escuchar a legisladores y sectores productivos, con el objetivo de proteger la economía nacional sin disparar la inflación. En especial, se puso atención en las pequeñas y medianas empresas, muchas de las cuales dependen de insumos provenientes de Asia para seguir operando. La presidenta fue clara: no se trata de cerrar la economía, sino de fortalecerla sin afectar a consumidores ni productores.
Ajustes clave para proteger precios y producción
Uno de los puntos centrales fue evitar impactos negativos en las cadenas productivas. Sheinbaum destacó que el Senado abrió mesas de trabajo con representantes del sector empresarial, sobre todo pymes, lo que permitió ajustar el paquete arancelario para evitar aumentos de precios y frenar riesgos de desabasto.
La presidenta recordó que la Secretaría de Economía tiene facultades legales para aplicar esquemas diferenciados, reducir cargas fiscales o establecer periodos de transición, siempre dentro del marco legal. Esto, dijo, permite reaccionar ante posibles efectos adversos sin decisiones arbitrarias. El mensaje fue directo: no provocar inflación ni frenar la producción en México es la prioridad.
Diálogo con Asia y avances del Plan México
Sheinbaum confirmó que China, India y Corea del Sur son los países que más se han acercado tras el anuncio de los aranceles. Con ellos ya existen mesas de trabajo activas para analizar posibles esquemas de cooperación económica. Aunque aclaró que aún no se define si habrá un tratado comercial formal, dejó abierta la puerta a acuerdos que beneficien a ambas partes.
Todo esto forma parte del Plan México, la estrategia económica de su gobierno para fortalecer la producción nacional. Como primeros resultados, destacó que el sector textil ya muestra señales de recuperación, con menos importaciones y mayor producción interna. En cuanto a medicamentos, reiteró que no están sujetos a aranceles, mientras se impulsa la producción farmacéutica nacional.
Al final, Sheinbaum resumió la postura de su administración: equilibrar el crecimiento interno con relaciones internacionales estables, sin enemistarse con ningún país y cuidando el bolsillo de las familias mexicanas.
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