Por: Cortesía

Política

Tocaron la puerta equivocada: Alfredo Adame explica situación ante el SAT

Después de que un juez federal vinculó a proceso al actor Alfredo Adame, candidato a diputado federal por el partido Redes Sociales Progresistas (RSP), por no informar al Servicio de Administración Tributaria (SAT) sobre su cambio de domicilio fiscal, el conductor de televisión aseguró que se trata de un error de parte del verificador que asistió a el domicilio, quien presuntamente tocó la puerta equivocada.

El famoso afirma que la empresa por la que se le señala “desde 2012 está en suspensión de actividades. No tiene ingresos, no tiene trabajo, no tiene nada y ha seguido declarando en ceros, como dice la ley”, explicó a Azucena Uresti en entrevista con el portal de noticias Telediario. 

Por tal motivo, y a sugerencia de su contador, Adame cambió el domicilio fiscal el 17 de noviembre de 2019, a la dirección del despacho de contadores con el que trabaja. De acuerdo con su relato, 15 días después de la certificación del trámite, un verificador del SAT asistió al sitio para corroborar la información, pero tocó la puerta equivocada. Dado que en el mismo predio se encuentran una casa, un garaje y una oficina, la "confusión" ocurrió cuando una mujer de edad avanzad,  que habita el lugar, atendió la puerta y negó la existencia de tal empresa.

El candidato asegura que hace poco más de tres meses recibió una notificación, por lo que decidió contactar un abogado penalista. “Me dijo 'no es nada grave, no es de cárcel y no es de absolutamente de que preocuparse'”, comentó en el programa en vivo. “De lo que se trata es que el SAT acusa de falsedad en declaración porque a los 15 días de que fuiste a dar de alta el domicilio fiscal con tu contador, fue un verificador. Sin embargo, Felipe de Jesús Delgadillo Padierna, juez de control del Centro de Justicia Penal Federal en el reclusorio Sur, determinó que las pruebas aportadas por la Fiscalía General de la República (FGR) eran suficientes para iniciar un proceso en su contra. El acto asegura que ni su candidatura, ni su libertad corren peligro.