Empresas refresqueras deben tomar conciencia del daño por endulcorantes, dijo.
“Para mí la salud es un tema fundamental, es parte del Humanismo Mexicano, lo he tenido de manera permanente en la agenda legislativa y en este periodo no será la excepción, si carecemos de esta condición vital, es imposible pensar en desarrollo integral, en educación efectiva, en cualquier aspecto que conduzca al progreso”, aseguró el senador Alejandro Armenta, al reiterar un llamado a las empresas refresqueras a sensibilizarse en lo referente a sus procesos de producción e ingredientes de las bebidas.
Al ser entrevistado por medios de comunicación, desde el Senado de la República, recordó que uno de los motivos que le llevó a escribir “La pandemia de los edulcorantes” fue precisamente el incremento preocupante “en enfermedades como la diabetes, por eso insisto en la necesidad urgente de cambiar la fórmula de preparación de las bebidas, porque sí, eliminaron el azúcar, pero agregaron este químico que tiene una afectación directa al sistema inmunológico, tenemos estudios para probarlo, es un tema delicado que nos debe ocupar, desde la ley y con acciones firmes”.
Al respecto recordó que en la Ley de Ingresos se ha mantenido como una constante que año con año crezca el impuesto a las bebidas con edulcorantes “las empresas refresqueras tienen utilidades extraordinarias y su argumento, siempre, es que las cargas impositivas les generan afectaciones laborales, pero yo, respetuosamente, creo que no es así; ellas tienen una responsabilidad social, entender que el gran problema de la diabetes, de obesidad que tenemos en México, es en buena parte por el abuso en el consumo de refrescos, entonces hay que hacer conciencia”.
Finalmente consideró que a pesar de los impuestos a las bebidas “necesitamos hacer conciencia entre la población también, que no consuma en exceso refresco, eso implica un acto de voluntad, es un asunto social”.