Este proyecto forma parte de un plan integral que contempla la apertura de 15 Casas Violetas durante los primeros 100 días de su administración, con un objetivo claro: prevenir feminicidios y proteger a las víctimas.
Puebla.- El gobernador de Puebla, Alejandro Armenta, inauguró en la región mixteca la primera Casa Violeta, una iniciativa destinada a combatir la violencia contra las mujeres y garantizar su acceso a la justicia.
Este proyecto forma parte de un plan integral que contempla la apertura de 15 Casas Violetas durante los primeros 100 días de su administración, con un objetivo claro: prevenir feminicidios y proteger a las víctimas.
“Si esta Casa Violeta logra salvar la vida de una mujer, con eso habrá valido la pena. Ese es el propósito contundente que tenemos”, afirmó el mandatario durante la inauguración.
Servicios integrales para las víctimas
La Casa Violeta ofrecerá un refugio seguro para mujeres, niñas, niños, adolescentes y adultos mayores que han sido víctimas de violencia. Además, contará con un equipo multidisciplinario compuesto por:
- Abogados y agentes del Ministerio Público para asesoría legal.
- Psicólogos y criminólogos para apoyo emocional y evaluación de riesgos.
- Médicos legistas e investigadores para garantizar el acceso a la justicia.
Idamis Pastor Betancourt, titular de la Fiscalía General, destacó que este proyecto integral estará presente en las 27 microrregiones de Puebla, acercando la procuración de justicia a las comunidades de los 217 municipios.
Reconocimiento local
La presidenta municipal de Acatlán, Guadalupe Bárcenas, expresó su orgullo de que este municipio sea el primero en contar con una Casa Violeta. "Este espacio funcionará como refugio para las mujeres que han sido víctimas de violencia, ofreciendo protección y servicios integrales", destacó.
El gobernador Alejandro Armenta reiteró su compromiso de no permitir la impunidad en los casos de violencia contra las mujeres y señaló que las Casas Violetas son un esfuerzo preventivo para garantizar la seguridad y los derechos de las poblanas.
Con esta primera Casa Violeta, Puebla da un paso adelante en la lucha contra la violencia de género, reforzando su compromiso con la equidad, la justicia y la seguridad de las mujeres.